19/08/2024
¿Qué es realmente el “Nuevo Ecuador”? Parece que este término se ha convertido en un simple eslogan, una utopía que no se ha materializado. La delincuencia sigue en niveles alarmantes, situándonos como el país más violento de América. El supuesto "Nuevo Ecuador" se asemeja más a un "Ecuador Ensangrentado".
A pesar de las promesas y las palabras de campaña, la realidad es otra. El desempleo sigue en cifras preocupantes, impulsando a muchos jóvenes a unirse al crimen. ¿Acaso ellos no forman parte de ese “Nuevo Ecuador”? Cada día presenciamos allanamientos y confiscaciones de droga, sin transparencia sobre su destino final. El gobierno no solo es incapaz de contener la delincuencia, sino que tampoco parece competente en investigarla adecuadamente. En otros países, este tipo de operativos se realizan bajo la supervisión de notarios y la prensa; aquí, todo parece estar envuelto en misterio.
En estos ocho meses de gestión, no se ha detenido a ningún cabecilla. Bajo su mandato, Fito se fugó. Y la pregunta que muchos se hacen sigue sin respuesta: ¿Dónde está el dinero del IVA? El “Nuevo Ecuador” se ha convertido en el país de los políticos inútiles y silentes, que no saben cómo enfrentar un incendio que nos consume lentamente. Las promesas de barcazas, cárceles y universidades son solo espejismos de mercadeo político, humo y espejos con fines electorales.
Quizás este “Nuevo Ecuador” solo exista en el mundo digital, una realidad virtual llena de “tik-toks” que aturden y adormecen a la gente, pero con sueños plagados de hambre y miedo. Incluso los partidarios en la prensa comienzan a mostrar su incomodidad; los constantes cambios de autoridades afectan la gobernabilidad, y los acomodos para beneficiar a Wilmer Terán dejan clara su alianza con Correa.
El regreso de este personaje no parece importarle, ya que con su fortuna puede vivir en cualquier parte del mundo. Aunque su elección fue con un discurso anticorreísta, parece que eso nunca le preocupó realmente. Su mandato se ha caracterizado por quejas, culpas y berrinches que ya no asustan a nadie.
El “Nuevo Ecuador” que prometió ha terminado siendo una tierra de nadie. Este es el verdadero reflejo del país, aunque usted, Presidente, intente ocultarlo tras unas gafas ahumadas.