01/08/2021
A estas alturas en que Sendero Luminoso ha entrado por la puerta grande tras el nombramiento de Guido Bellido, alguien que ha negado el accionar sanguinario de la senderista Edith Lagos, como Presidente del Consejo de Ministros, sectores que ayer se mostraban simpatizantes al régimen del 'lapicito', tales como Alberto Vergara, Marco Sifuentes y Rosa María Palacios hoy demuestran su entendible rechazo al mismo y su coqueteo con una potencial vacancia presidencial.
Sin embargo, hay que tener cuidado con que la cura resulte más cara que la enfermedad. Tras la vacancia de PPK por su vínculo con la corrupción de Odebrecht, Vizcarra surgió como una esperanza. Terminó decepcionando a sus más fervientes seguidores tras su negociado en el caso Conirsa.
La promoción de una podría parecer una alternativa frente al extremismo y la influencia del impresentable de Vladimir Cerrón, sin embargo esta tendría que darse luego de la inhabilitación política de Dina Boluarte, a fin de evitar un "Vizcarra 2.0". Hoy algunos dicen que Boluarte al estar involucrada en el caso Los dinámicos del centro, "caería sola", sin embargo, olvidan el blindaje que históricamente se ha dado a los presidentes involucrados en corrupción en nuestro país.
En este escenario, un auténtico gobierno de concertación es viable si sólo si la presidenta del Congreso, Maria del Carmen Alva se muestra como una política capaz de liderar una transición demócrata, que se acerque al Perú a espaldas del Estado, y sobre todo, alejada de los fantasmas que nublan a Acción Popular tras el breve régimen de Merino. Veamos qué sucede.