26/08/2024
Hoy quiero compartirte algo que quizá pueda animarte a dar ese salto que tanto deseas, pero no te has animado.
Yo también he estado allí, al filo de ese gran abismo que está a un paso de nosotros y tanto bagaje de emoción nos genera. ¡Lo he vivido muchas veces!
Estos días tomé un gran salto, y me animé a aceptar el reto de trabajar cómo Profesora en una Universidad en México, para impartir un Diplomado en “Neurociencia aplicada a la Educación” a Profesores Universitarios de distintas carreras.
Uno de los aprendizajes más significativos que me ha dejado el estudio de las Neurociencias, es la importancia que tiene la forma de cómo descodificamos nuestras emociones y la manera en que nos proyectamos a través de ellas. Es así, cómo vibramos lo suficientemente alto para alcanzar aquello que deseamos o vibramos tan bajo que saboteamos nuestro propósito.
Así que, anímate a trabajar tu voluntad, a mirarte al espejo y repetirte cada día lo capaz que puedes ser aún en medio del miedo o la escasez y ¡SALTA!
“Los hombres deben saber que del cerebro y solo de él vienen las alegrias, las delicias, el placer, la risa, y también; y el sufrimiento, el dolor, las lágrimas.
Y por él, adquirimos sabiduría y conocimiento y vemos y oímos y sabemos lo que está bien y lo que está mal, los que es dulce y lo que es amargo. Y por el mismo órgano nos volvemos locos y deliramos, y el miedo y los terrores nos asaltan.
Es el maximo poder en el hombre” Hipócrates.
