03/08/2024
Confiar en la gente 03 - Agosto
«Muchos de nosotros no tendríamos adonde ir si no hubiéramos confiado en los grupos de NA y sus miembros.»
Texto Básico, p. 97
Confiar en la gente es un riesgo. Los seres humanos son notablemente olvidadizos, indignos de confianza e imperfectos. La mayoría procedemos de ambientes en los que la traición y la insensibilidad eran algo común. Hasta nuestros amigos más fiables, no eran muy dignos de confianza. Cuando llegamos a las puertas de NA, la mayoría teníamos cientos de experiencias que confirmaban que no había que fiarse de la gente. A pesar de todo, nuestra recuperación exige que confiemos. Nos enfrentamosalsiguiente dilema: aunque no siempre se pueda confiar en la gente, debemos hacerlo. Teniendo en cuenta las evidencias de nuestro pasado, ¿cómo lo hacemos?
Primero, recordamos que las reglas de la adicción activa no se aplican a la recuperación. La mayoría de nuestros compañeros de NA están haciendo los máximos esfuerzos para vivir de acuerdo a los principios espirituales que aprendemos en el programa. Segundo, nos acordamos de que nosotros tampoco somos fiables al ciento por ciento. Seguramente decepcionaremos a alguien, por mucho que nos esforcemos en no hacerlo. Tercero, y lo más importante, vemos que necesitamos confiar en nuestros compañeros de NA. Nuestra vida está en juego, y la única manera de mantenernos limpios es confiar en esas personas bien intencionadas que, admitámoslo, no son perfectas.
Solo por hoy:
Confiaré en mis compañeros de NA. Aunque sin duda no son perfectos, son mi mayor esperanza.