07/07/2023
En Lonquimay, un grupo de aproximadamente 20 familias se encuentra enfrentando una situación desesperante, ya que hace casi 8 meses no tienen acceso al agua. Esta problemática surgió tras la llegada de una comunidad mapuche que, según los afectados, les estaría exigiendo hasta $2 millones al año para permitirles utilizar el recurso hídrico.
El acceso al agua solía ser posible a través de un canal construido hace aproximadamente 80 años en la zona. Sin embargo, los propietarios del Fundo Alviso, por donde pasa el canal, habían otorgado un acceso perpetuo al acueducto, junto con una merced de agua registrada en el Conservador de Bienes Raíces de la comuna de Curacautín.
Según uno de los afectados, la dueña del fundo habría cedido el terreno al Estado debido a deudas, y desde 1997, el Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap) se hizo cargo y entregó esos terrenos a familias mapuche. No obstante, actualmente, el canal pasa por terrenos pertenecientes a la comunidad mapuche, quienes presuntamente habrían solicitado a los afectados 1000 fardos de pasto al año o $2 millones para permitirles el acceso al agua. Ante esta solicitud, los afectados rechazaron de inmediato, ya que conocían la situación legal del acueducto.
La negativa de acceso al agua ha generado estragos en el ecosistema del sector Lolen, ya que no hay riego para los prados ni agua potable para los animales.
Los afectados afirman haber presentado un amparo de Aguas y haber obtenido una sentencia favorable, pero hasta el momento la comunidad mapuche no ha acatado dicha sentencia, argumentando que no están sujetos a la jurisdicción chilena.