18/08/2024
LA BIBLIA EN LA NUEVA VENEZUELA: LA ESPADA DEL ESPÍRITU
«Yo usé la espada de Bolivar para libertar a esta nación, pero ahora lo haré con la espada del ESPÍRITU». Dios por medio del profeta JAIME BOTELLO en la profecía "El examen histórico"
En esta hora, la hora de la gran convergencia de voluntades, entre las cuales priva la Voluntad de Dios, veo cumplimientos proféticos tan específicos, claros y trascendentes que no puedo dejar de pensar en ello. Mi mente construyó una línea de tiempo plena de detalles que ha capacitado mi mirada y mi visual para ver sus evidencias e interpretarlas en el marco respectivo. Las referencias proféticas titilan en mi pensamiento como si fuera el tablero de mi vehículo.
En esa observación de señales indicadoras de cumplimiento profético me encuentro con este pensamiento del libertador Simón Bolivar. Fueron parte de sus palabras introductorias en el Congreso de Angostura: «La [...Biblia...] obra Divina que nos ha enviado la Providencia para mejorar a los hombres, tan sublime, tan Santa» (los corchetes son míos). Este pensamiento de nuestro libertador, me hace recordar unas paralelas bíblicas, por supuesto, cargadas de mayor autoridad por tener la inspiración divina reveladas en manos del apóstol Pablo: «Las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra».
Inspirado por todas estas palabras tan trascendentes comprendo cuan sagrado lugar ha de cumplir la palabra de Dios en la construcción nacional que verá Venezuela en los años por venir. Con Bolivar me atrevo a parafrasear que la Biblia es el manual que nuestro Supremo Autor nos ha dado para construir a los Protagonistas De La Nueva Venezuela hombres y mujeres temerosos de Dios para asumir los roles protagónicos que desde el empíreo nos asigne el Señor de esta "Tierra de gracia".
Cuanto anhelo ver a los protagonistas de la nueva política venezolana siendo cada uno como lo dice el Espíritu por medio de Pablo en Romanos 13: «Autoridades superiores» y «servidor de Dios». Justificándose este calificativo por la convicción que nos dejan sus actuaciones reflejando el principio del «por Dios han sido establecidas».
Cuanto anhelo ver a los protagonistas de la nueva economía venezolana siendo cada uno pilares del levantamiento económico de nuestra patria en todos sus sectores: agricola, agroindustrial, ferrominero, pecuario, acuicola, construcción, textil, metalúrgico, turístico, piscícola, ganadero, automotriz, petrolero, comercial, tecnológico, científico, salud, infraestructura, vial y mucho más.
Cuanto anhelo ver a los protagonistas del nuevo poder judicial venezolano siendo cada uno verdaderos administradores de la justicia, del derecho, las leyes y la rectidud divina, arantizando los verdaderos derechos y deberes de cada ciudadano sin distingo de raza, ideología, credo o condición social.
Cuanto anhelo ver a los protagonistas del nuevo poder legislátivo venezolano siendo cada uno verdaderos legisladores con sentido de estadistas y visión de país, inteligentes, sabios, estrategas, visionarios, probos, virtuosos, responsables legislando a favor del bienestar de todos y en función de la visión de Dios para nuestra nación.
Cuanto anhelo ver a los protagonistas de la nueva cultura venezolana siendo cada uno modelos facilitadores de una nueva sociedad venezolana fundamentada en los altos valores de la probidad moral, el amor por el trabajo fructifero, la solidaridad, las relaciones, el amor propio, familiar, patrio y el amor a Dios. Una sociedad compuesta por una ciudadanía responsable y orientada al desarrollo, la complemetariedad y la interdependencia.
Cuanto anhelo ver a los protagonistas de la nueva educación venezolana siendo cada uno verdaderos cultores, maestros y mentores de los ciudadanos de bien, críticos, responsables, sobrios, inteligentes, sabios, intelectualmente excelentes, con un alto sentido de compromiso y proactividad para no esperar de otros, sino trabajar para el bienestar propio y de todos. Especialmente, me gustaría ver a estos protagonistas de la educación recompensados y compensados por toda la humillación que han sufrido todos estos años. Que lo por venir como a José en la corte del rey de Egipto, les haga olvidar todos sus sufrimientos y vivan felices cumpliendo su misión.
Cuanto anhelo ver también a los protagonistas de la nueva defensa y seguridad venezolana siendo cada uno funcionarios de bien que infundan temor al transgresor y al malo, que sean garantía de verdadero cumplimiento de las leyes y nuestra sociedad se sienta en ellos resguardada y respetada.
Cuanto anhelo ver a los protagonistas de la nueva iglesia cristiana evangélica venezolana siendo cada uno razón y causa para que todos glorifiquen al Dios del reino celestial al cumplir su importante rol espiritual entre nuestro pueblo no solo en lo misional, sino también en lo social haciendo realidad el sueño de nuestro Señor Jesucristo quien dijo: «que vean vuestras buenas obras para que glorifiquen al Padre que esta en los cielos». Que sean estos protagonistas los que protagonicen el gran empoderamiento por el Espíritu Santo que haya visto nuestro país en toda su historia, que seamos nosotros los usados por el Señor para llenar a nuestra tierra de prodigios, señales y milagros reveladores de la presencia del Señor en nuestra tierra, que seamos nosotros los que prediquemos el evangelio puro y sencillo, pero salvador, trascendental y transformador para que nuestras iglesias aumenten en número de verdaderos discípulos de Cristo, llenos del Espíritu Santo para ser responsables y reproductivos llevando a otros a la misma experiencia redentora; que seamos nosotros los protagonistas de la multiplicación de iglesias por todo el país y fuera de nuestras fronteras hacia Europa, Africa, Oceanía, Asia y el resto del continente americano; que seamos nosotros igualmente los protagonistas del gran movimiento misionero que hoy en medio de esta crisis asoma sus características al ver esa gran movilización ciudadana internacional que, además de su efecto político, nos da una idea a los proféticos (no necesariamente profetas) de su efecto misionero. Ya muchos de los que cumplirán ese anunció profético de Venezuela a las naciones estan en el campo asignado, solo falta el momento del inicio, aunque ya una buena parte ha iniciado y avanza.
En fin, deseo con todas las fuerzas de mi alma, mi espíritu, mi mente y mi cuerpo que la Venezuela protagonista de la construcción de Venezuela Nueva se levante de sus miedos, sus frustraciones, sus odios y resentimientos, sus pecados y faltas para embarcarse en este gran proceso de construcción nacional. Que se destierre sin retorno al "Juan Bimba" venezolano, el tracalero, el vivaracho, el "ponganme donde hay", el "mucho cacique y puro indio". Quiero ver enterrado al "quitate tú pa'pone'me yo", al "¿cuánto hay pa'eso?", al que se la sabe todas. Que muera la "Vieja Venezuela" y hagamos nacer la Nueva con el concurso de todos aportando nuestras mejores fuerzas.
Señor, que esta espada desenfundada cumpla el propósito para el que fue esgrimida. Vamos, mi Dios, ¡liberanos con la Espada de tu Espíritu! En el nombre de Jesús, ¡Amén!
Mstr. Giovani Pelayo