04/09/2024
Todavía hay personas que pisan las hojas secas para disfrutar del crujido.
Aun hay personas que juegan.
Jugamos a que un buen verso salva una vida. Jugamos a que el amor es más importante que la prosperidad. Jugamos a pensar, a enloquecernos con un acorde. Jugamos a creer que lo mejor de la vida todavía no sucedió. Claro que allí están las personas razonables que nos desprecian y nos llaman ilusos. Y se ríen de nuestros juegos y de nuestros sueños.
Para ellos es todo el mundo. El mundo de los adultos y de los burgueses.
Porque los juegos - el sueño secreto de la juventud - es cosa de gente seria.