12/28/2024
CÓMO LIBERARNOS DEL ESTRÉS SEGÚN LA PALABRA DE DIOS
Septiembre 16
1. Confía en Dios y entrégale tus preocupaciones:
"Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas" (Proverbios 3:5-6).
2. Busca la paz de Dios a través de la oración:
"No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias" (Filipenses 4:6).
3. Deposita tu carga en Dios, porque Él se preocupa por ti:
"Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes" (1 Pedro 5:7).
4. Recuerda que Dios te fortalecerá y te ayudará:
"Pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán" (Isaías 40:31).
5. Medita en las promesas de Dios y en su fidelidad:
Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre, para que se arrepienta. ¿Lo ha dicho El, y no lo hará?, ¿ha hablado, y no lo cumplirá?
Números 23:19
2 Timoteo 2:13
si somos infieles, El permanece fiel, pues no puede negarse a sí mismo.
6. Busca la presencia de Dios y descansa en Él:
"Descansa en Dios solo, alma mía, porque mi esperanza viene de él" (Salmos 62:5).
7. Mantén tu mente en las cosas de Dios y en su paz:
"El que tiene la mente firme en ti, en ti encuentra la paz, porque confía en ti" (Isaías 26:3).
8. Busca la sabiduría de Dios y no te angusties por el futuro:
"No te afanes por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal" (Mateo 6:34).
9. Agradece a Dios en todo momento y alaba su bondad:
"Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús" (1 Tesalonicenses 5:18).
10. Descansa en la soberanía de Dios y su cuidado constante:
"En paz me acostaré y dormiré, porque solo tú, Señor, me haces vivir confiado" (Salmos 4:8).
Recuerda que la Biblia es una fuente de sabiduría y consuelo, y estos versículos pueden ser un punto de partida para encontrar alivio en medio del estrés y la preocupación. Te animo a que también consultes y medites en otros pasajes bíblicos que te brinden consuelo y esperanza en tu caminar cristiano.