02/02/2022
Nieta, hija, sobrina, hermana, prima y amiga de caciques, Alma Carolina Viggiano Austria escuchó desde niña la palabra dominar. Desde escuincla el espíritu le fue inyectado con la ambición más grande que tiene: gobernar Hidalgo. En las tertulias familiares sólo escuchó de argucias, la mira era apropiarse de Tepehuacán de Guerrero, la zona donde nació.
Criada en un mundo de caciques, la hoy esposa de Rubén Moreira Valdés “Zerevro”, también aprendió las formeas de sumisión y obediencia a los poderes centrales asentados en Pachuca. Incluso forjó una historia que le hiciera aparecer como “serrana” que conquista la capital de Hidalgo; ella triunfadora y atiborrada de honestidad.
Pese a las promesas, la propaganda y el deambular por los pasillos del poder de Carolina Viggiano, las condiciones de vida de los habitantes de Tepehuacán de Guerrero y San Juan Ahuehueco no cambiaron. “La Serrana” fue un fracaso como secretaria, aunque en sentido contrario, sus arcas y bienes patrimoniales empezaron a engordar como fruto de la especulación inmobiliaria y el abuso de poder.
La cosecha por manejar recursos públicos, operar con poder en los litigios de sus protegidos, entre ellos su ex marido Sergio Beltrán Merino, pronto se reflejó en términos económicos, a tal punto que a San Juan Ahuehueco, “Caro llega en helicóptero para que no la molesten”, dicen fuentes del pueblo.
Con la SEDESOH como patrimonio familiar, los caciques de los clanes Viggiano Austria, Quijano Austria, Viggiano Trejo, Austria Muñoz y Trejo Quijano se apoderaron del poder regional, municipal, del comercio, de la carne, “de todo”.
A Carolina Viggiano, no le ha sido difícil ubicar a sus parientes directos en las distintas dependencias. Ella ha sido parte íntima del círculo de los 4 últimos gobernadores de Hidalgo. Es el caso de Juan Olavi Quijano Austria, entre otros, sostenido en la Secretaría de Educación de Hidalgo (SEPH), pese a las denuncias que pesan sobre él por las múltiples anomalías cometidas en contra de los profesores: ventas de plazas, de horas, cambios irregulares de zona, acoso sexual a maestras, son el funcionamiento normal de la oficina que dirige Olavi Quijano Austria