23/11/2024
YANQUE: DON GERARDO HUARACHA, EL GUARDIÁN DEL LEGADO ANCESTRAL EN LA CASA MUSEO UYU UYU
En una de las zonas más altas de Arequipa, donde el cielo transmite paz y serenidad, se encuentra don Gerardo Huaracha, un hombre que reconoció el legado de sus ancestros y se convirtió en el curador de la Casa Museo Uyu Uyu, un emblemático recinto cultural ubicado en la comunidad de Chakapata, dentro del distrito de Yanque, provincia de Caylloma.
Con profundo orgullo, don Gerardo recordó que hace 20 años decidió convertir su hogar en un espacio cultural e histórico. La vivienda fue heredada de su abuelo Félix Huaracha, quien fue un importante cacique en la localidad. “Mi padre me contaba muchos relatos y me mostraba los objetos que el patriarca guardaba en sus almacenes. Un día, me quedé solo con todos estos recuerdos y decidí aprovecharlos”, relató el septuagenario.
El rumbo de su vida cambió con la visita de un joven extranjero, un estudiante de California (Estados Unidos), que se hospedó en su casa durante dos años. “Se quedaba impresionado con la sala, el techo de paja y la pintura artesanal en las paredes. Me sugirió que podía convertirla en un museo, y con esa idea en mente, empecé a trabajar”, explicó Gerardo.
Entusiasmado, comenzó a identificar los tesoros escondidos en su hogar, revisar los antiguos escritos de su abuelo y desempolvar valiosas fotografías. Así nació el Museo Uyu Uyu, un espacio que desde sus inicios ha atraído a mochileros y turistas en busca de historias, recuerdos y experiencias únicas.
“El joven extranjero se marchó, pero me deseó suerte con el proyecto, que hasta ahora mantengo con esfuerzo y dedicación”, añadió Huaracha, quien también es beneficiario del programa Pensión 65.
El camino hacia la Casa Museo Uyu Uyu comienza en Arequipa, desde donde se viaja a Chivay, capital del Valle del Colca. Tras tres horas de trayecto, se toma un autobús hacia Yanque, conocido por sus iglesias coloniales y danzas tradicionales. Desde allí, una caminata lleva al hogar de don Gerardo, quien describe la travesía como una experiencia mística.
“Mi vivienda, humilde pero mágica, es parte de mí. Aquí transmito cultura y despierto la curiosidad por nuestro pasado. Empecé este proyecto hace 20 años, y poco a poco comenzaron a aparecer hoteles y restaurantes en la zona, lo que trajo más visitantes interesados en conversar conmigo. Tengo huacos, fotografías con recuerdos imborrables, cerámicas y otros objetos que transportan al pasado”, concluyó Gerardo, decidido a seguir compartiendo su conocimiento con las nuevas generaciones y fortaleciendo la identidad de su comunidad como curador de la Casa Museo Uyu Uyu.