Miscelanea Press

08/05/2024

La historia se redescubre en cada momento, sorprendente.

En el remoto corazón del Pacífico Sur, la enigmática Isla de Pascua ha sido durante mucho tiempo un crisol de misterio y fascinación.

Sus icónicas cabezas de piedra, los Moai, han desconcertado a generaciones con su mirada imperturbable hacia el horizonte. Sin embargo, lo que parecía ser un enigma estático ha dado un giro sorprendente.

Los arqueólogos, en un esfuerzo por desentrañar los secretos enterrados bajo la superficie de la isla, han emprendido excavaciones meticulosas alrededor de estas colosales figuras.

El resultado ha dejado boquiabiertos incluso a los más avezados investigadores: ¡los Moai tienen cuerpos completos!

Estos cuerpos, largamente ocultos bajo la tierra, emergen ahora como testigos silenciosos de una historia aún más compleja. Pero la sorpresa no termina ahí. Adornando estos cuerpos recién descubiertos se encuentran inscripciones antiguas, petroglifos enigmáticos que parecen narrar historias perdidas en el tiempo.

La Isla de Pascua, una de las regiones más remotas y aisladas del planeta, revela así nuevos capítulos de su intrigante pasado. Talladas por el ingenio y la destreza del pueblo Rapa Nui entre los siglos XIII y XV, estas monumentales esculturas se erigen ahora como guardianes de un legado ancestral, cuyos secretos apenas comenzamos a desentrañar. Con más de 3200 kilómetros separándola de la costa chilena, esta isla remota sigue siendo un faro de interrogantes y descubrimientos en el vasto océano del conocimiento humano.




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10/04/2024

El Gran Colisionador de Hadrones confirmó la existencia de una elusiva partícula sin la cual el universo no existiría, al menos no de la manera en que lo conocemos. El físico británico Peter Higgs, fallecido este martes, fue quien publicó en 1964 una teoría que predecía su presencia en el mu...

26/03/2024

Se aprecia el conocimiento del cuerpo humano y la perfección de sus pliegues, admirable.

"SÁTIRO Y BACANTE" 1834 Escultor francés: JAMES PRADIER Periodo: 1790-1852 Técnica: mármol Ubicación: Museo del Louvre en París

Su exposición en el Salón de 1834 provocó un escándalo por el realismo y la se*******ad del desnudo. El tema del sátiro codiciando una bacante es clásico en el arte erótico y tiene sus orígenes en la antigüedad. A pesar de que rara vez se les representaba juntos en una escena erótica, el artista James Pradier jugó con la se*******ad que se desprende de la obra y con la desnudez de los personajes.

Durante su exposición en el Salón de 1834, el grupo de mármol provocó polémica. La se*******ad del desnudo, el realismo del tratamiento, especialmente en los detalles de los pliegues de la carne, su abandono y el gesto del sátiro que al quitar la tela revela por completo la desnudez de la bacante, son percibidos por la crítica como contrario al ideal de la estatuaria neoclásica al que se adhirió Pradier. Sobre todo porque este tema, generalmente reservado para esculturas de pequeña escala, se representa aquí en tamaño natural. Al escándalo se sumó el rumor lanzado por Antoine Étex , alumno de Pradier, de que el desnudo habría sido obtenido de un yeso del natural, práctica que fue desaprobada en su momento. Además, algunos creyeron reconocer los rasgos de Juliette Drouet, la modelo y amante favorita de Pradier en ese momento, con quien tuvo una hija.

El grupo representa una escena erótica entre un sátiro y una bacante, remitiendo así a la mitología griega. El sátiro es una exuberante criatura rural que pertenece a la tiasa, procesión de Dionisos. Suele estar borracho, sobre todo a causa del vino, que representa la sexualidad, la fiesta y la procesión. La bacante es originalmente uno de los criadores de Dionysos. Según las versiones del mito, ella es una ninfa o una mujer humana dedicada a su dios. En la procesión de Dionysos, también se refiere a la celebración y a la sexualidad asumida. Se sabe que los sátiros encantan a las mujeres y más específicamente a las bacantes, los dos seres que siempre participan en las orgías dionisíacas.