30/07/2021
EL EXTRAÑO CASO DE LA NIÑA DE BLANCO Y SU PERRO FANTASMA
Se decía en investigaciones de antaño, recapituladas por investigadores de hoy, que la menor tenia una enfermedad extraña que la debilitaba mucho, no se sabia a ciencia cierta que padecía, aunque sus padres hicieron todo lo humanamente posible por salvarla, la salud de la menor empeoraba, estando en agonía, su perro estaba a su lado.
Ella le dijo que cuando fuera espíritu vendría a verlo y se lo llevaría, mucha gente con lógica pensó que era una simple petición de una niña en agonía, al fallecer, se hicieron los preparativos para dicho evento.
En su sepelio se reunió mucha gente, mas nadie se percato del perro que movía la cola y miraba en dirección a la recamara, ahí en esa ventana la niña fallecida saludaba a su mascota.
Pasaron los días y los sucesos extraños ocurrían uno detrás del otro, lo mas notorio era que en el jardín de la casa el perro jugaba con alguien, efectivamente era la niña fallecida.
Pasando un tiempo el perro empezó a desmejorar, aunque lo llevaron al veterinario, el les informo que el perrito estaba muriendo de tristeza, ya que la perdida de su ama le afecto.
Hasta que finalmente, el buen can acompaño a su amita en esa otra vida, al paso de los años era común por así decirlo, verlos juntos en los alrededores de la casa, se sabe que es malo no descansen sus almas, pero aquí ella como su perro, de algún modo cuidaban a los suyos y la casa y eso los llenaba de felicidad.
EL EXTRAÑO CASO DE LA NIÑA DE BLANCO Y SU PERRO FANTASMA
Se decía en investigaciones de antaño, recapituladas por investigadores de hoy, que la menor tenia una enfermedad extraña que la debilitaba mucho, no se sabia a ciencia cierta que padecía, aunque sus padres hicieron todo lo humanamente posible por salvarla, la salud de la menor empeoraba, estando en agonía, su perro estaba a su lado.
Ella le dijo que cuando fuera espíritu vendría a verlo y se lo llevaría, mucha gente con lógica pensó que era una simple petición de una niña en agonía, al fallecer, se hicieron los preparativos para dicho evento.
En su sepelio se reunió mucha gente, mas nadie se percato del perro que movía la cola y miraba en dirección a la recamara, ahí en esa ventana la niña fallecida saludaba a su mascota.
Pasaron los días y los sucesos extraños ocurrían uno detrás del otro, lo mas notorio era que en el jardín de la casa el perro jugaba con alguien, efectivamente era la niña fallecida.
Pasando un tiempo el perro empezó a desmejorar, aunque lo llevaron al veterinario, el les informo que el perrito estaba muriendo de tristeza, ya que la perdida de su ama le afecto.
Hasta que finalmente, el buen can acompaño a su amita en esa otra vida, al paso de los años era común por así decirlo, verlos juntos en los alrededores de la casa, se sabe que es malo no descansen sus almas, pero aquí ella como su perro, de algún modo cuidaban a los suyos y la casa y eso los llenaba de felicidad.