25/01/2025
¡De perseguidor a apóstol!
Hoy celebramos la Conversión de San Pablo, un momento que nos recuerda que el amor de Dios puede transformar cualquier corazón.
La Fiesta de la Conversión de San Pablo, celebrada cada 25 de enero, conmemora el momento decisivo en la vida de Saulo de Tarso, quien pasó de ser perseguidor de los cristianos a uno de los más grandes apóstoles de Cristo.
Según el relato de los Hechos de los Apóstoles (9, 1-19), Saulo iba camino a Damasco con la intención de arrestar a los seguidores de Jesús, cuando una luz celestial lo derribó y escuchó la voz de Cristo que le decía: “Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?” Este encuentro transformó completamente su vida, llevándolo a convertirse en el gran evangelizador de los gentiles y defensor incansable del Evangelio.
San Pablo dedicó el resto de su vida a predicar la Palabra de Dios, fundar comunidades cristianas y escribir cartas que aún hoy inspiran a la Iglesia.
¿Cómo nos ayuda el testimonio de San Pablo en la vida cristiana?
La vida de Pablo nos muestra que nadie está fuera del alcance de la misericordia de Dios.
Como a Pablo, Cristo también nos llama a un encuentro transformador que dé sentido a nuestra vida.
San Pablo vivió y murió por Cristo, recordándonos que nuestra fe debe ser vivida con convicción y alegría.
Hoy, preguntémonos: ¿Estoy dispuesto a dejarme transformar por el amor de Cristo? Como San Pablo, respondamos al llamado de Jesús con generosidad y valentía.
¡Que San Pablo interceda por nosotros para ser discípulos fieles y anunciadores del Evangelio!