14/03/2025
🟥🟦 LOS HOMBRES DE SOMBRERO QUE SON EL TERROR DE LA EXTREMA DERECHA EN EL PERÚ.
(Por Pedro Morales)
No nacieron en el viejo oeste norteamericano. Los dos hombres de sombrero de paja “toquilla”, nacieron en la región Cajamarca, cuna de las rondas campesinas. Ambos maestros de escuelas rurales, dictaron clases en las provincias de Chota y Jaén.
Pedro Castillo, saltó a la palestra política en la huelga magisterial del año 2017, donde dio el salto de calidad, que más tarde determinaría su candidatura a la presidencia de la república y por consiguiente su triunfo electoral el año 2021.
Gregorio Santos Guerrero, rondero desde los 12 años, se construyó un liderazgo social y más tarde fue un personaje político, que lo llevó en dos oportunidades a ocupar la presidencia del gobierno regional de Cajamarca; sin olvidar que estando en prisión preventiva, fue candidato a la presidencia de la república.
¿QUÉ HICIERON ESTOS DOS HOMBRES DE SOMBRERO PARA GANARSE EL ODIO DE LA EXTREMA DERECHA?
Castillo, se ganó el odio de la extrema derecha, porque quiso aplicar una política estatal de expropiación y nacionalización de los recursos naturales en manos del gran capital privado en el Perú; quería cobrarle los más de 65 mil millones de soles a los empresarios que le deben al Estado; buscaba a través de un proyecto de ley que la enseñanza pública sea gratuita hasta la universidad con el ingresó libre; quería lanzar la segunda reforma agraria; había acordado junto con los trabajadores desaparecer los contratos CAS, y el respeto a las negociaciones de los pactos colectivos, y muchas otras reformas en favor de los millones de peruanos que habían votado por el cumplimiento de su plan de gobierno, hasta el año 2026.
Santos, con más de 150 mil ronderos muchos de ellos montados a caballo, junto con el movimiento popular, tomaron la zona de influencia del megaproyecto minero Conga de la empresa norteamericana Newmont y la obligaron a retirarse con una resistencia que duró más de un mes de paro indefinido, que tuvo un costo social, que conmovió al Perú y al mundo.
Como en el Perú la extrema derecha no debate y menos tiene una conciencia política, lo único que sabe pedir es la acción rápida del aparato militar del Estado, que hiere y asesina en nombre Dios y de la “democracia” a campesinos, jóvenes, adolescentes, obreros y trabajadores, indefensos que luchan por el agro, el agua y la defensa de la naturaleza que les brinda los alimentos de generación en generación.
Santos desde el año 1012 hasta hoy, y Castillo desde el año 2021 hasta este año 2025; fueron y son el terror apocalíptico de la extrema derecha. La extrema derecha no puede verlos ni en pintura. Los dos hombres de los sombreros y ponchos de lana, son para el clero los “demonios”.
COMO LA EXTREMA DERECHA NO PUEDE CON ELLOS, RECURRE A LA EMBOSCADA JUDICIAL
La extrema derecha controla todo en el Perú. El Ministerio Público, el Poder Judicial, las Fuerzas Armadas, la PNP, la Defensoría del Pueblo, el Tribunal Constitucional y todas las carteras ministeriales.
Como la extrema derecha no puede con los argumentos y planteamientos de Santos y de Castillo, recurre a la emboscada judicial, que son las únicas armas con la que cuentan, no tienen más. Y no tienen más porque no tienen capacidad y menos preparación ideológica.
Castillo y Santos, en un debate programático e ideológico, los revuelcan a todos los representantes de la extrema derecha, que lo único que saben hacer es beneficiar con sus proyectos de ley al crimen organizado.
SI MAÑANA FUERAN LAS ELECCIONES CASTILLO Y SANTOS BARREN EN LAS ELECCIONES GENERALES.
Castillo, cuenta con el 16% de intención de votos, por su parte Santos, obtuvo el 5% de respaldo, cuando fue candidato presidencial.
Los millones de peruanos que volverían a votar por estos dos personajes políticos de poncho y sombrero, son hoy el terror al rojo vivo de la extrema derecha, que los prefieren a ambos en la cárcel y no en libertad, porque libres son un peligro para los intereses del gran capital, quienes son los que gobiernan el Perú y que la extrema derecha son sus empleados de turno.
Lima, 13 de marzo de 2025