13/01/2025
EL MENSAJE DE LA COMUNIDAD POR PRIMERA VES EN LA RADIO A NIVEL NACIONAL
Los 5,000 ejemplares del Libro Grande yacieron ociosos en el almacén de Edward Blackwell. durante meses después de su publicación, pareció que se había desperdiciado el papel que habían impreso. Bill y Hank estaban convencidos de que el libro tendría éxito si llegaba a las manos adecuadas, la de los alcohólicos sufrientes; pero por el momento, no podían venderlo. No estaban seguros de que pudieran deshacerse de él; buscando publicidad, habían hecho el intento con todas las revistas de circulación nacional sin que le hicieran el menor caso; ningún editor había descubierto todavía el gran potencial de A.A. Para que el libro empezara a moverse, necesitaban alguna clase de publicidad a nivel nacional. Entonces Morgan R., el miembro que recién había dejado de beber y que había guiado el libro a través del Comité Católico sobre Publicaciones, tuvo una idea espléndida. Antes de aterrizar en una época mala, Morgan había sido publicista de éxito. "Conozco muy bien a Gabriel Heatter y estoy seguro que nos dará una mano", declaró Morgan. Heatter tenía un programa de radio inmensamente popular llamado "Nosotros la Gente".
Se especializó en entrevistas de interés humano seguidas por un comentario conmovedor que decía con una voz consoladora y paternal. En 1939, una entrevista en "Nosotros la Gente" tenía un valor publicitario equivalente al de los programas nocturnos de TV, de hoy. Fue una pequeña oportunidad, pero valió la pena. Heatter aceptó la proposición y programó a Morgan para una entrevista. Perfilaría la carrera de bebedor y la recuperación de Morgan, e incluiría material del libro; serían sólo tres minutos, pero se transmitiría a toda la nación. Bill y Hank estaban seguros de que Gabriel Heatter proporcionaría el gran avance que habían estado esperando. El programa sería exactamente una semana después, el 25 de abril a las 9 p.m. Había un obstáculo:
¿Qué pasaría si Morgan se emborrachaba?
Sólo recientemente había sido dado de alta de la institución de Greystone. Para evitar esa posibilidad, Hank persuadió al reacio irlandés a que se sometiera a una vigilancia continua durante la semana que faltaba para la noche de la emisión. Con ese objeto, aseguraron el uso de una habitación doble en el Club Atlético del Centro de Manhattan y alguien permanecería con Morgan a todas horas. Lo hicieron relevándose sin permitir que en ningún momento se apartara de su vista. El plan promocional de Hank para acompañar la emisión fue mandar tarjetas postales a todos los doctores que residían al este del Mississippi, anunciándoles el programa de Heatter e incitándolos a que compraran un ejemplar de "Alcohólicos Anónimos".
Las respuestas se remitirían a la Alcoholic Foundation. Para conseguir los 500 dólares que necesitaban para el envío de la correspondencia, suscribieron pagarés contra Works Publishing, una acción audaz en vista de la condición de quiebra de la compañía. Después de mandar por correo 20,000 tarjetas postales, confiaron que, a consecuencia de la emisión de Heatter, llegaría una avalancha de respuestas.
Sin aliento, esperaron el momento en que A.A. se convertiría en una palabra de uso común. Una vez más hablaron de ventas de libro por toneladas. "Una hora antes del programa, todos nuestros miembros y sus familias se reunieron ante sus radios para esperar el gran momento", recordó Bill. Se mostraron señales de alivio en los hogares de todos los miembros de Nueva York cuando se escuchó la voz de Morgan, había llegado al plazo fijado sin emborracharse. Durante tres minutos se agitaron los corazones y se encargó de eso Gabriel Heatter, bien ayudado por Morgan, que como hombre de la radio no se quedo atrás".
Este es el texto completo de la entrevista en "Nosotros la Gente". Heatter:
"El hombre que está a mi lado tiene una de las experiencias más emocionantes y dramáticas que conozco. No voy a decirles su nombre y, cuando escuchen lo que les tiene que decir, creo que comprenderán por qué; pero después de comprobar los hechos, el Comité de Escuchas de "Nosotros la Gente", decidió concederle el tiempo, porque sienten que si a una persona se la ayuda por escuchar su historia, entonces " Nosotros la Gente " habrá hecho un verdadero servicio. Muy bien señor.
Anónimo: "Hace seis meses salí de un manicomio. Me mandaron ahí porque estaba bebiendo como para morirme, pero los doctores dijeron que no podían hacer nada por mí, y hace sólo cuatro años estaba ganando 20,000 dólares al año, estaba casado con una muchacha estupenda y tenía un hijito. Pero trabajaba duro y como muchos de mis amigos, solía beber para relajarme, sólo que ellos sabían detenerse y yo no. Pronto mi manera de beber me sacó del trabajo; prometí a mi esposa que me corregiría, pero no pude. Finalmente, me dejó, llevándose con ella al bebé. El año siguiente fue como una pesadilla: estaba sin un centavo, deambulaba por las calles, pedí limosna para comprar licor. Cada vez que dejaba de beber, juraba no volver a tomar otra gota; pero, si seguía sin beber durante algunas horas, empezaba a llorar como un niño y me temblaba todo el cuerpo. Un día después de dejar el manicomio, me encontré a un amigo quien, a su vez, me llevó a casa de uno de sus amigos. Ahí estaban sentados algunos hombres, fumando puro, contando chistes, divirtiéndose mucho; pero noté que no estaban bebiendo. No podía creerlo cuando Tom me aseguró que todos habían estado en el mismo barco que yo, y añadió: ¿Ves a ese tipo? Es un doctor y por beber perdió su práctica. Luego se corrigió y ahora es jefe de un gran hospital. Otro individuo fuerte y grande era dependiente de una tienda de comestible y uno más, el vicepresidente de una gran compañía. Se juntaron hace cinco años y se llaman a sí mismos Alcohólicos Anónimos y desarrollaron un método de recuperación. Uno de sus más importantes secretos ha sido ayudar a otro alcohólico. al empezar a practicarlo, el método demostró tener éxito al ayudar a otros a ponerse bien, dándose cuenta que podían permanecer alejados del licor.
Gradualmente, esos hombres me ayudaron a volver a la vida y dejé de beber, y encontré el valor para enfrentarla una vez más. Hoy, tengo un empleo y voy a regresar al éxito. Recientemente, escribimos un libro que se llama
"'Alcohólicos Anónimos'" y que narra precisamente cómo todos regresamos de una muerte en vida. Trabajando en ese libro hizo que me diera cuenta de l mucho que otra gente ha sufrido, de cómo todos pasaron por lo mismo que yo. Por eso quise venir a este programa; quería decir a quienes están pasando por ese tormento que si sinceramente lo quieren, pueden regresar, ¡tomar su lugar en la sociedad de nuevo!".
(Aplausos), (Música).
Bill y los demás descansaron entonces y especularon sobre cómo manejarían el torrente de solicitudes que sabían que ya estaban en camino. Bill recordó el gran dominio de sí mismos, que ejercieron para no acercarse a la oficina de correos durante tres días íntegros. Cuando finalmente fueron a revisar el apartado, levaron maletas vacías para meter ahí las tarjetas de respuestas.. Los esperaba un escaso puñado de cartas. "Con ansia enfermiza, miramos las 12 respuestas", contó Bill. "Algunos nos tomaron el pelo sin misericordia; otras respuestas, escritas sin duda por médicos con sus copas dentro, eran totalmente ilegibles. Las dos restantes eran pedidos del libro 'Alcohólicos Anónimos' ".
TRANSMITELO.