14/07/2024
La historia del Chueco
Muy recién a mi llegada, al nuevo proyecto de trabajo, en un pueblo pequeño en las cercanías del estado de Zacatecas, mas específico en el municipio de Poanas Durango, el pueblo “La Noria de Pilares”. Era imposible dejar de notar aquella figura, ese ser que caminaba algo extraño, al que, apodaban “El Chueco” … No era difícil adivinar el por qué le decían así. Era curiosa su forma de caminar, parecía arrastrar una de sus extremidades.
Al preguntar por él, la gente decía:
- Es el Chueco, aunque parece enojón, no lo es… es dócil, solo que ha perdido mil batallas. -comentaba la gente al referirse a él, es extraño que lo contaran con tanta indiferencia.
El “Chueco” era un gran enamorado, que transitaba día y noche por el pueblo, sobre su frágil cuerpo, se podía ver el registro de las innumerables batallas, cicatrices visibles y una extremidad a punto de perder la movilidad. Pero era enamorado y muy mal correspondido, mas, sin embargo, no perdía la esperanza de algún día ser retribuido.
En una ocasión, se encontraba muy enfermo, desde mi oficina, escuchaba aquella “tos” que retumbaba. Todos pensábamos que era el fin de aquel pobre ser… mas el destino, le dio otra oportunidad, al igual que en el amor… ya que de nuevo se encontraba detrás de ellas, solo que esta vez, por un lio que se formó, fue golpeado y herido de gravedad… esta vez, parecía ser el final.
El Chueco, tirado en la banqueta, mal herido, con una herida visible en su cuello perdió (como siempre) su última pelea, por amor, perdió lo mas preciado… los que lo miraban, veían en sus ojos como su alma abandonaba su cuerpo.
Descanse en Paz, “El Chueco”, ese perrito callejero que vivía enamorado de las perras alborotadas, los perritos mas fuertes no le daban oportunidad.