22/12/2024
22 de diciembre de 1914
Rip-Rip insiste de nuevo: “Villa y Zapata reaccionarios coaligados contra el constitucionalismo”
Como un balazo en el pie fue un editorial publicado esta mañana en el diario del carrrancismo, “El Pueblo”, firmado por el periodista Rafael Martínez, Rip-Rip, donde de nuevo, como sus compañeros comentocratas, atacó a villistas y zapatistas, acusándolos de ser reaccionarios y no revolucionarios, porque aceptaban entre sus filas elementos porfiristas, huertistas y otros actores de las clases privilegiadas. Sin embargo, el editorialista pasó por alto mencionar la formación política porfirista de su máximo guía y líder don Venustiano Carranza.
“Las tendencias y circunstancias características de los contendientes en la tremenda lucha que agita al país están ya perfectamente marcadas, claras, inequívocas, precisas. Los revolucionarios tienen como enemigos a los reaccionarios coaligados. Con Villa y Zapata están patentes, manifiestos, semiocultos u ocultos del todo, los privilegiados de ayer que alimentan la esperanza de volver a disfrutar de las concesiones obtenidas en la era porfiriana por más que fuesen inicuas y lesionasen bárbaramente intereses de la colectividad, nacionales; los poseedores de ricas y enormes propiedades que habiendo pagado, por tratarse de ellos, el diez por ciento o menos de lo que como contribuciones les correspondía, en tanto que sobre el pequeño propietario pesaban todos los gravámenes, indefectiblemente cobrados, entiendan que la Revolución depuradora y justiciera, habrá de impedir que esos vicios administrativos inveterados sigan siendo prácticas abominables; muchos jefes y oficiales del Ejército del dictador Díaz y del usurpador Huerta, que no se avienen a la condición de los vencidos y sueñan con la preponderancia de su militarismo; cierto claro intrigante que se ha empeñado en mezclar la religión con la política, hacer de aquella un medio para obtener victorias en ésta, que se dejó sugestionar por Huerta cuando le ofreció a cambio de la ayuda que necesitaba, hacer triunfar al “candidato católico” en las “elecciones” generales y que, naturalmente resulta comprometido por ese capítulo, por sus combinaciones con Urrutia y por sus muchos ardides para combatir al Constitucionalismo.
“En suma, la Revolución tiene en contra de ella, todos los elementos conservadores en el sentido reaccionario: oligarcas, clero intrigante y militarismo pretoriano. Es natural y lógico que esto acontezca. La Revolución posee como miras esenciales acabar con privilegios y vicios; los privilegiados y los que con esos vicios medraban había de ser y serán sus irrefrenables contendientes. Todos los reaccionarios, en la Revolución tienen al enemigo común; lógico es que se coaligaran, aún habiendo entre ellos motivos múltiples que los separen, que los dividan y hasta que los hagan estorbosos y repugnantes unos a otros.
“¿La revolución arrollará a la reacción o ésta a la primera? Tal es la pregunta que ni revolucionarios ni reaccionarios podremos contestar; el tiempo lo dirá y de modo irrebatible. Lo que sí decidimos nosotros, los constitucionalistas por convencimiento, por convicción, es que tenemos fe inmensa, porque sabemos que nuestra causa es la del progreso que ordena que sucumba lo defectuoso; la de la Justicia que reclama que lo inicuo no subsista y la del Derecho político que ha de producir la efectividad de las prerrogativas y el bienestar general. No somos optimistas sistemáticos; entendemos que podrán ser muchas, duras y aún graves la peripecias de la Revolución, que las horas de prueba podrán ser hasta tremendas; pero lo mismo ayer que hoy y que mañana, tenemos en lo más íntimo que la Revolución triunfará, arrollando a cuantos se llamen zapatistas, villistas, etc., y que son los brazos armados de la Reacción. Rip-Rip”.
Calificar a los ejércitos revolucionarios de la División del Norte y del Ejército Libertador del Sur de “reaccionarios” fue un elemento de la guerra propagandista de los corifeos carrancistas. Esta estrategia se fundamentó en el volante redactado por Obregón contra la ‘Trinidad maldita’ de principios de diciembre de 1914, donde se dio pauta para que Villa comenzara a ser vinculado directamente con la “reacción” y no sólo se le reprochara su insubordinación, así como su “negro pasado”, Los medios utilizados por esa corriente fueron el diario “El Pueblo” y un par de conferencias. Mientras, los periódicos “El Monitor” y “El Convencionista” se encargaron de divulgar la opinión de los revolucionarios villistas y zapatistas.
Emiliano Zapata y su Estado Mayor, retrato de grupo. Diciembre de 1914. © (292517), México, Secretaría de Cultura – INAH – Sinafo – FN.