18/06/2024
Por Ángel Iván Mancera
CELAYA, Gto. El reloj se ha detenido en un tiempo fuera que jamás volverá a recuperarse. Lo mismo que el balón ha dejado de botar y su tabla con el rayado de la cancha y su plumón, han quedado guardadas para siempre.
El deporte celayense y en especial el básquetbol se han vestido de luto, luego del inesperado fallecimiento del prestigiado entrenador Mario Alejandro Contreras Curiel, la tarde del sábado en la Ciudad de México, por complicaciones de salud, a la edad de 48 años.
De carácter fuerte, disciplinado y entusiasta a la hora de dirigir, Mario Alejandro Contreras, nacido un 11 de septiembre de 1975, siguió los pasos de su tío Fernando Curiel, entonces entrenador del equipo Alutec; de tal manera que Mario, inició su carrera como instructor del deporte ráfaga en el Complejo Educativo Ignacio Allende, a mediados de la década de los noventa (1994), siendo aún alumno de la institución, donde como parte de su servicio social, dedicó a instruir y dirigir a los equipos representativos infantiles, en los albores de una prestigiada trayectoria que se prolongaría a lo largo de casi tres décadas, por diferentes instituciones no sólo de Celaya, sino de México, hasta sus últimos días.
Su hermano Rafael, compartió con VITRINA DIGITAL, que de niño, en casa de su abuela, un vecino tenía un tablero, donde empezaron a jugar básquetbol, en muchas ocasiones, practicando los tiros, tratando de anotar.
“Mario tendría como quince o 16 años, cuando le tomó más ese gusto por el básquetbol, donde le dio otro significado, de hecho, como tal tuvo muy poco la oportunidad de jugarlo, era más de observarlo y dirigirlo; era también aficionado al América y al León”, contó Rafael.
Tres años más tarde, para 1997, Mario llegó al Colegio Manuel Co**ha Marista, que sería no sólo su segunda casa, a la que posicionó en lo más alto del deporte, en especial de su querido básquetbol; Contreras Curiel, emuló los pasos de su tío Fernando, siendo entrenador de su deporte en el CMC, dentro de la rama varonil donde repuntó como entrenador, ganando sus primeros “laureles” y siendo colocado como coordinador deportivo de la institución, en el año del 2002, en la época dorada del deporte del Marista, dentro del fútbol, básquetbol y hasta en porristas; Mario fue un baluarte, colocando a su escuela en lo más alto del deporte privado en México, a nivel nacional e incluso, internacional, con el YBOA.
Dentro de su labor de escritorio, gestionó y afilió al Marista a CONADEIP, siendo la primera institución que recibió un nacional; fue un logro de Mario.
Ahí permanecería hasta el 2009, cuando emprendió el vuelo, para conquistar nuevos horizontes. Valió la pena el sacrificio, dejando una vara muy alta.
Mario Alejandro se caracterizó no sólo por la rigidez con la que se manejaba en el banquillo, siendo un líder nato por naturaleza, ayudando a sus pupilos y alumnos en todos los sentidos, encausándolos en el deporte y ayudándolos a ser ganadores, como jugadores y personas de bien.
Contreras Curiel dejaría Celaya para llegar a la UDLA en Puebla, como asistente, continuando ganando; pero partió a Morelia y a la postre a la Universidad de León, en aquella entidad, ya como coach titular e indiscutible; pero quiso más y llegó al Instituto Tecnológico de Monterrey, campus Ciudad de México, para posteriormente, regresar a Celaya y apoyar a la Asociación Municipal de Básquetbol de Celaya, así como al Alutec y arribar al banco de los Linces del Instituto Tecnológico de Celaya, equipo al que pocos tienen el privilegio de dirigir.
“Siendo hermanos, chocábamos, porque había una ausencia al dedicarse al deporte, estar de lleno en su labor y volver hasta en la noche, para descansar; además de que a mí, me gusta mucho el fútbol y él era basquetbolista, entonces, ya te imaginarás…”, confesó Rafael, su hermano.
“Fue una gran persona, un hermano de carácter fuerte, pero si necesitabas algo, te apoyaba”, agregó.
Así, la tarde del sábado, Mario perdió el juego más importante de su vida, por complicaciones de salud en la Ciudad de México, luchó e insistió hasta el final.
El domingo por la tarde, sus restos fueron velados en la Funeraria San Rafael, dentro de la sala Zafiro, después de las cinco de la tarde, hasta donde le acompañaron cientos de amigos, familiares y conocidos, quiénes en medio de la tristeza y consternación, le dieron el último adiós, al tiempo de demostrarle así el gran cariño que sentían por él, hacia su señora madre, Luz María Curiel Trejo y a sus hermanos, Luz Mariana y Rafael.
Al lado de su féretro, colocaron una camiseta de juego de Alutec, así como arreglos florales y coronas, de parte de De Acero Summit, AMBC, Familia Obregón, Lauro Pérez “Tres Caídas”, Linces del Tecnológico y Familia España Curiel.
Tres cuadros, con fotografías de Mario, formaron parte del recinto, que se vio repleto, la gente no cesaba de arribar al lugar de mostrar sus condolencias a la familia, además de despedirse de Mario.
Algunos de los integrantes del equipo representativo de Alutec, asistieron con su playera de juego, al igual que los jugadores de Linces, último equipo al que Mario dirigió y les hizo saber que ellos podían; de hecho, ellos le brindaron una serie de aplausos y arengas, en medio de la tristeza, embargados
“Lo que me deja contento, es que vino mucha gente a acompañarlo, a despedirlo, le guardaron un gran cariño y aquí ves esas semillitas que él sembró, esto me deja muy tranquilo, el que muchas personas de distintas generaciones nos hayan acompañado, tanto a niños, adolescentes, personas de 40 años, que me lo han hecho saber, que lograron ser alguien mediante el deporte, gracias a mi hermano”.
Excompañeros de trabajo, especialmente, del ámbito del básquetbol, acudieron para despedirse del prestigiado entrenador.
“Les dejó los valores y enseñanzas para seguir adelante, a todos ellos les doy las gracias, por el apoyo que nos han dado, eso nos da mucha tranquilidad de que todo el tiempo que les dedicó, fue por su bien, por fomentar el deporte y encausarlos, lo vamos a extrañar, pero sabemos que él vivirá en los corazones de sus amigos, de sus dirigidos, exalumnos y de nosotros, su familia”.
Para este lunes, a las cinco de la tarde, se realizará la misa de cuerpo presente de Mario, en el templo de la Virgen de Los Pobres y posteriormente, sus restos serán cremados y colocados en un nicho, en el templo de Cristo Redentor, junto a su señor padre (QEPD), Mario Contreras Zaragoza.
De esta manera, Mario ha cambiado de cancha, ahora, dirigirá entusiastamente desde el cielo, con la misma disciplina, carácter y coraje que le caracterizaron, dejando en este mundo terrenal no sólo un gran legado, como persona, amigo y entrenador, sino un hueco, difícil de llenar. A la memoria de Mario Contreras Curiel, en paz, descanse…
SUS PALABRAS
“Lo vamos a extrañar, pero sabemos que él vivirá en los corazones de sus amigos, de sus dirigidos, exalumnos y de nosotros, su familia”
Rafael Contreras Curiel
Hermano de Mario Contreras Curiel (QEPD)
