31/12/2024
No sabían que yo era semilla
Apóstol Ana Cristina Castillo
Cuanto me han lastimado, cuanto me han herido, han hablado cosas indecibles acerca de mi reputación, de mi actuar, incluso de mi forma de hablar... Me lastimaron hasta morir, hasta mis huesos dolían, lloré noches seguidas y también juré que no lloraría más, grité a corazón abierto: DIOS qué pasa conmigo?
Lo que no supieron es que yo era semilla y mi maestro supo quitar poco a poco todo lo que no servía de mi para hacer una cosecha victoriosa de mi vida...
Tenía que morir para vivir, tenía que pegarle a la cáscara desde adentro para salir, TENIA que cambiar...
Y entendí que todo lo que viví, tenía un propósito, todo lo que creí de muerte fue de vida, lo que sufrí fue para alegría, la pena se convirtió en gozo y mi aflicción terminó...
Solo uno me acompaña en mis noches de insomnio, solo uno me lleva de la mano a campos fértiles, porque ahí soy semilla para cosas mejores...
Hoy agradezco cada mirada, cada gesto de desprecio, cada humillación, cada maltrato, cada ofensa, cada proceso, cada mentira que dijeron de mi, porque:
De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.
S. Juan 12:24 RVR1960
GRACIAS!
En el agradecimiento viví y aunque morí estoy más viva que nunca! Lo que creí perdido hoy lo pongo por ganancia, porque gané en conocimiento de Cristo, aunque perdí todo, todo lo gané en Cristo, aunque fui llamada basura, soy valiosa en Cristo.
Y no digo que lo haya alcanzado ya, ni que no necesite morir a más, sino que prosigo... Y sigo y continúo hacia la meta del Supremo Llamamiento.
Filipenses 3:8-12 RVR1960