24/12/2024
En una de las novelas oficiales de Itachi Shinden, hay una escena donde Itachi se encuentra con Naruto niño. Itachi había terminado de vigilar la oficina Hokage y se dirigía a su casa cuando se encontró con un solitario Naruto en los columpios de un parque. Aquí les dejo la escena👇
Pasara lo que pasara, Itachi tenía que prevenir la rebelión de su clan. Había dicho que él y Shisui lo harían, pero ciertamente era una tarea más que difícil.
“¡Bua, ja, ja!”.
Una fuerte voz ensordecedora perforó sus oídos en su camino a casa desde el trabajo. Inconscientemente, su pie se detuvo, y notó el pequeño parque que estaba delante de él. Ya era tarde, por la noche. Hacía mucho tiempo que el sol se había deslizado hacia el oeste, y una penumbra descendía sobre el área.
Un chico, probablemente el que rió, estaba parado en un columpio, mirando fijamente a las tres siluetas humanas que se alejaban. Quizás eran sus amigos.
“¡Se los estoy diciendo, ustedes no son nada en comparación al gran Naruto Uzumaki!” el niño en el columpio gritó.
Las sombras no se regresaron, se marcharon de la zona charlando entre sí sobre algo. Tras observar fijamente a los tres, el chico que se había nombrado a sí mismo Naruto, se sentó tristemente en el columpio. Sus anteriores palabras habían sido claramente una muestra de coraje. Itachi entendió la situación al escuchar el nombre del niño.
No había ni una sola persona que no conociera a Naruto Uzumaki en la aldea.
El chico ante él había estado involucrado en el incidente del Nueve Colas que atemorizó a los habitantes de Konoha. El niño con el Nueve Colas dentro de él. Cuando anda por la calle, todo el mundo baja la voz. Sólo había una persona que no sabía que el Nueve Colas vivía en su interior.
Era Naruto mismo.
Sin saber de la calamidad de la aldea; el Nueve Colas fue sellado en su cuerpo, y vivía con la gente temiéndole constantemente. Naruto no podía entender por qué lo menospreciaban. Y para acabarla, sus padres ya no estaban en este mundo y no tenía a nadie que le diera un amor incondicional.
Itachi avanzó hacia el parque. Caminó discretamente hacia el columpio donde estaba el chico, moviéndose débilmente hacia adelante y atrás. Se sentó al lado de Naruto, quien tenía la cara agachada.
“¡Whoa!” Al notar la repentina aparición de Itachi, Naruto estuvo a punto de caerse del columpio. Aleteó los brazos y piernas exageradamente y detuvo el columpio antes de mirar con ojos sospechosos a Itachi. “No me andes espantando así”.
“Lo siento”.
“Entonces, ¿quién eres?” Naruto lo miró con los ojos muy abiertos.
Impulsando el columpio, Itachi dirigió la mirada hacia adelante. “No importa quién soy, ¿o sí?”.
“Mi mamá dice que no hable con extraños”.
“Ah... ¿tu mamá? Pero ella ya no está, ¿verdad?” dijo Itachi.
Una sonrisa tímida se extendió por todo el rostro de Naruto mientras colocaba la mano derecha en la nuca. “Jeje, ¿lo sabes?”.
“Sí, Naruto Uzumaki es un bromista famoso”.
“¿En serio soy tan famoso?”.
“Por así decirlo”.
“¡Je, je, je!” Naruto reía felizmente, incapaz de entender el sarcasmo de Itachi.
“Tus amigos ya se fueron”.
“Si no entienden mis bromas, entonces no son mis amigos”. La voz de Naruto era excesivamente brillante, como si estuviese tratando desesperadamente de actuar con alegría de forma que su soledad no fuese percibida.
Todo el mundo conocía el verdadero yo de Naruto.
Para la aldea, el incidente del Nueve Colas había dejado una cicatriz más profunda que cualquier otra cosa. Sospechosos de haber llamado a la mítica bestia, los Uchihas estaban atrapados bajo esa nube. Itachi mismo había sido difamado más veces de las que podría recordar por eso. Probablemente no había una sola persona en la aldea dispuesta a tener ningún contacto significativo con el niño que albergaba la fuente de ese trauma en el interior de su cuerpo.
En otras palabras, Naruto era la mayor víctima del incidente del Nueve Colas.
Itachi no sabía cómo fue que el Nueve Colas terminó sellado en su cuerpo, pero pensaba que quien haya hecho que un bebé terminara con semejante bestia en su interior no estaba en su sano juicio. Tal vez no consideraron cómo sería perseguido el chico.
El incidente del Nueve Colas era un secreto celosamente guardado en la aldea. La verdad estaba escondida en la oscuridad, y sólo quedaba Naruto. Naruto era una parte de la oscuridad de la aldea. La aldea se construyó sacrificando personas como Naruto. Los funcionarios de la aldea sellaron la catástrofe en él y dirigieron el descontento de la gente hacia el clan Uchiha para ingeniosamente mantener la aldea a flote.
Produciendo intencionalmente una oscuridad para ocultar su propia oscuridad…
Y ahora Itachi también era una parte de la oscuridad de la aldea Porque el Anbu en sí, era la verdadera oscuridad de la aldea.
“¡Amigo!”.
“¿Hnm?”.
Naruto abrió los ojos a su lado. "De repente te quedaste callado, ¿te pasa algo?"
“No, no es nada”.
“Está bien”, Naruto alzó la mirada hacia Itachi, con preocupación en sus ojos.
“Probablemente ya es hora que vayas a casa”.
“Sí, debería pero no es como si alguien me estuviera esperando”. La boca de Naruto se arqueó hacia abajo, estaba actuando ser alguien rudo.
“Bueno, ya me voy”.
“¡¿Qué?!” Naruto gritó exageradamente sorprendido cuando Itachi se levantó.
“Sigue luchando”, dijo Itachi y pensó que sus Palabras no ofrecían una autentica tranquilidad.
Pero Naruto parecía feliz, y se rio entre dientes mientras se frotaba la nariz con su dedo. Y luego, estando seguro de sí mismo, saltó energéticamente del columpioy con su dedo índice señaló a Itachi “¡Mi nombre es Naruto Uzumaki, y seré Hokage algún día!”.
“¿Tú… Hokage…? ¿eh?” Una llama se encendió en el corazón de Itachi. A pesar de cargar con el peso de la oscuridad de la aldea, este chico no estaba renunciando a su propio destino. Sin respetar a la aldea y sin odiar a la gente, él creía en su propio sueño con honestidad y con fuerza. “Espero que lo seas”.
“Claro, recuérdame hasta entonces, amigo”.
Sonriendo en respuesta, Itachi le dio la espalda, y comenzó a caminar.
Los cielos brillaban con las estrellas.