La historia no es un ariete para percutir con el pasado a los contrincantes del presente. Tampoco es un oficio de eruditos polvorientos encerrados en su torre de marfil. La historia es un hacer cultural; a la par pensamiento, narrativa y ciencia. Ha llegado el momento de conocer el patrimonio cultural legado por nuestros historiadores. Esto es lo que se propuso la editorial Urgoiti al fundarse el
año 2000. De aquello han pasado ya quince años. Probablemente esté Urgoiti entre las decanas de las pequeñas editoriales españolas de culto. Con ello queremos manifestar nuestra voluntad de supervivencia. No caminamos al margen del mercado, pero tampoco estamos a su servicio. Estamos construyendo un mercado de lectores cultos (y apasionados) al que suministramos algo que no ofrecen otros: la historia como producto cultural. Al presentar el balance del tiempo transcurrido, no vamos a narrar las dificultades que han debido superarse. Expondremos quiénes somos y el trabajo hecho. Somos un grupo de historiadores profesionales españoles, que se plantearon la editorial como órgano de difusión de un proyecto intelectual: dar a conocer la historia como género cultural, manifestado en autores y libros, y constructor –a su vez– de actitudes y pensamientos. Como primera medida, nos propusimos la edición de dos colecciones: Grandes Obras e Historiadores. En “Grandes Obras” editamos aquellos libros que han supuesto un hito, de cualquier tipo, en el hacer historiográfico de nuestro país; en “Historiadores” publicamos aquellos trabajos que, sin ser necesariamente obras maestras, ejemplifican el modo de hacer y pensar de los historiadores más destacados. Estos quince años, han dado como fruto veinte títulos de “Grandes Obras” y doce de “Historiadores”. ¿Muchos o pocos? Los que hemos podido, porque detrás de cada uno de nuestros libros hay un serio trabajo de investigación que requiere encontrar el especialista, el tiempo y la feliz culminación de su trabajo, así como una pulcra y paciente labor de edición crítica de unos textos a los que aspiramos a dar dignidad en su regreso a los anaqueles. Sin ninguna duda, lo más importante de nuestros volúmenes es el estudio introductorio. No publicamos libros antiguos, sino trabajos de investigación acompañados de cuidadas reediciones de libros. Ofrecemos ediciones críticas, acompañadas de sólidos estudios preliminares (de entre 60 y 120 pp. –los hay que pasan de las 200–) en donde se dibuja la trayectoria vital del autor, el análisis de su obra, el contexto de su producción, su fama social, su influencia posterior, etc. Para ello, los colaboradores han sido siempre escogidos entre especialistas de comprobada solvencia profesional. Tampoco hemos descuidado el aspecto formal de nuestros libros. Creemos en la belleza del libro como objeto, y aspiramos a que el interés de sus páginas tenga un reflejo en la calidad de su presentación. Por el momento, nuestra labor se va a restringir a los historiadores españoles desde la Ilustración a nuestros días; es decir, aquellos que han concebido la historia como una ciencia. Incluimos también a algunos hispanistas destacados por su relevante influencia en nuestro país. Los hay de todos los ámbitos, tipos y tendencias, y su campo de trabajo abarca desde la prehistoria a la historia contemporánea. A pesar de estos primeros frutos, es pronto para intentar dibujar un perfil de la historiografía española: son sólo trazos de una labor en curso. La editorial tiene elaborada una primera selección de ciento cincuenta historiadores y cincuenta grandes obras, representativas del período a que nos hemos referido. Cuando tal empeño se haya culminado, será el momento de hacer balance científico de los resultados. Y de pensar en nuevas metas. Urgoiti Editores es consciente de lo ambicioso del proyecto, que afronta con modestia y con ilusión, esperando que cada libro constituya un paso adelante en esta empresa colectiva.