La libertad de pensar y de hablar constituye, al igual que la vida, el bien más preciado de la humanidad. Por ello, la opinión pública no puede construirse desde los intereses específicos de un sector de la sociedad, ni estar asociada a la propiedad sobre una empresa de comunicación. Si en tiempos pasados las plazas públicas fueron el escenario de los debates y la participación social, con la lleg
ada de la globalización y los avances tecnológicos, debemos hacer de las redes las nuevas plazas en donde se debatan los temas de interés público, con criticidad y conciencia social. A ello apunta ‘Tribuna’, un espacio creado por jóvenes del sur del país, con el ánimo de elevar el nivel de participación e interés ciudadano en los asuntos públicos y de debatir sobre la coyuntura política, económica y social del Ecuador, así como sobre las políticas públicas y demás decisiones que afectan directamente a nuestros derechos y nuestra calidad de vida.
