Chone, también conocida como San Cayetano de Chone, es una ciudad ecuatoriana; cabecera cantonal del Cantón Chone, así como la tercera urbe más grande y poblada de la Provincia de Manabí. Se localiza al centro-norte de la región litoral del Ecuador, en una extensa llanura, atravesada por el río Chone, a una altitud de 17 msnm y con un clima lluvioso tropical de 27°C en promedio.
Es llamada "La Ciudad de los Naranjos en Flor". En el censo de 2010 tenía una población de 52.810 habitantes, lo que la convierte en la vigésimo segunda ciudad más poblada del país y la tercera de la provincia. La ciudad es el núcleo del área metropolitana de Chone, la cual está constituida además por ciudades y parroquias rurales cercanas. El conglomerado alberga a más de 150.000 habitantes.
Sus orígenes datan del siglo XVIII, pero es a mediados del siglo XX, debido a su ubicación geográfica, cuando presenta un acelerado crecimiento demográfico que sería posteriormente, uno de los principales núcleos urbanos de la provincia. Es uno de los más importantes centros administrativos, económicos, financieros y comerciales de Manabí. Las actividades principales de la ciudad son el comercio, la ganadería, y la agricultura.
La ciudad y el cantón Chone, al igual que las demás localidades ecuatorianas, se rige por una municipalidad según lo estipulado en la Constitución Política Nacional. La Municipalidad de Chone es una entidad de gobierno seccional que administra el cantón de forma autónoma al gobierno central. La municipalidad está organizada por la separación de poderes de carácter ejecutivo representado por el alcalde, y otro de carácter legislativo conformado por los miembros del concejo cantonal.
El alcalde ocupa una dignidad significativa cuando asume sus funciones, tanto es así, que se lo considera heredero del jefe indio que dominó las zonas actuales de Chone en tiempos precolombinos, por lo que se considera que el rango a ocupar del alcalde en su despacho es el Sillón del Chuno y Sillón del Colibrí. Aunque el alcalde de Chone se encuentra sujeto a las mismas leyes que sus similares de otros cantones ecuatorianos y a las normativas implicadas en el desempeño de las funciones administrativas constadas en la Constitución, además históricamente los alcaldes de Chone fueron denominados Presidentes del Consejo Cantonal por periodos a mediados del siglo XX. De acuerdo con la legislación ecuatoriana vigente actualmente, el alcalde o alcaldesa de Chone también automáticamente adquiere un puesto en el concejo de su provincia asignada, es decir que se consagra jurídicamente como Consejero Provincial de Manabí.
La ciudad está rodeada de cerros y lomas que forman pequeños sistemas de elevaciones litorales con alturas que sobrepasan los 100 metros sobre el nivel del mar. En una de las llanuras costeras más bajas de la zona Norte de Manabí es donde se encuentra ubicada la Ciudad de Chone siendo fundada geográficamente entre los territorios pantanosos, semisecos, subtropicales y húmedos que derivan de la Cordillera Occidental de los Andes adyacente directamente al Océano Pacífico y a los pueblos relacionados directamente con la geografía costeña. El relieve más alto está concentrado en la parte sur-este, siendo su mayor altitud en el Cerro Blanco con 560 metros.
La cadena montañosa se asemeja a una pequeña corriente o micro ascendencia de la Cordillera Occidental de los Andes. Por el lado Oeste y Noroeste de la ciudad se encuentra rodeada por tres elevaciones terráqueas que se definen como tres cerros, y el mayor de estos se ubica en el medio conformando el conocido mirador turístico Cerro Guayas, donde se encuentra edificada la estatua del Cristo Redentor de Chone.
Chone limita:
Al norte con la provincia de Esmeraldas y el cantón Pedernales;
Al sur con los cantones de Pichincha, Bolívar y Tosagua;
Al este con El Carmen, Flavio Alfaro y la provincia de Los Santo Domingo y,
Al oeste con los cantones Sucre, San Vicente , Jama y Pedernales.
Chone es por excelencia una urbe subtropical de abundante y rica flora y fauna por lo que la ciudad se edificó en un territorio muy parecido a la selva ecuatoriana. El clima predominante es el cálido seco en verano, que va desde junio hasta noviembre, en épocas normales; y el cálido lluvioso en época de invierno, que va de diciembre a mayo. En verano los vientos modifican el clima y su temperatura oscila entre los 23 y 28 grados centígrados, mientras que en invierno alcanza los 34 grados centígrados, considerándose uno de los climas más inestables y desequilibrados de las regiones costeras del Pacífico sudamericano.
En Chone está la cuenca hídrica más grande de la provincia, que la forma el Río Chone y sus afluentes. En el norte del cantón nacen las microcuencas del Peripa y del Daule. La red hidrográfica está constituida por ríos, terrenos sujetos a inundación, lagos y charcos intermitentes, y esteros, entre los principales se encuentran: Chone, con sus afluentes Garrapata, Mosquito, Grande, Santo, Sánchez, La Pulga, Cañitas, Zapallo, Monito, Cucuy, Palalache, Convento, Manta Blanca, Plátano, La Iguana, Yahuila y Quiebra Cabeza.
Cultura
La ecuatorianidad da a conocer que el Montubio (prototipo masculino del campesino criollo) y la Comadre (prototipo femenino de la campesina criolla) han sido como en el resto de la costa ecuatoriana el eje fundamental en la integridad del nacimiento de sus culturas desde finales del siglo XIX donde la identidad criolla se hizo presente en los antiguos asentamientos de indígenas y mestizos costeños; a ellos se les atribuye difundir un lenguaje corporal muy creativo y melódico o corrido (que es llamado sin pensarlo); puesto que de esta invención gramatical han nacido vocablos, acentos lingüísticos y dejes propios de la zona (Véase Cultura del Ecuador).
Sus costumbres derivan de la mezcla de culturas emigrantes y campesinos españoles con el obrerado indígena. En Chone se los define como un ejemplo y símbolo de identidad, no como una clase social en concreto. Los denominados montubios acostumbran a recitar una serie de epitafios, frases, cuentos, versos y fábulas llamadas propiamente Amorfinos que son una especie de declamación y proclamación criolla que trata sobre temas amorosos, cotidianos, feministas, machistas, realidades y sucesos del momento, etc. dirigidos a un grupo seleccionado de personas o dedicados en el anonimato a alguien.
El Amorfino en sí es una serie de versos donde se conjugan las últimas sílabas de las palabras sea desde el principio y final de la frase, pronunciándola a capela o entonado con una melodía que es ejecutada en su mayoría de veces con una guitarra. La música nacida de la melodía criolla son el Pasillo, San Juanito, La Cumbia, Bolero y hasta Ranchera o Salsa, en el caso del amorfino más o menos es una mezcla entre la copla española muy similar al fandango junto con la literatura hispanoamericana enmarcada en el realismo del campesinado y obrerado que convive con los animales y la vegetación rústica del entorno, solo que con un sentido y léxico muy originales, enfrascándose principalmente en la graciosidad de las ocasiones abordando cualquier tema de forma chistosa, burlesca, animosa o en extremos ridiculizante, los montubios siempre dicen que hay que sonreírle a la vida, cantarle y dedicarle muchas cosas bonitas porque, vida solo hay una.
Son personas muy alegres y religiosas o devotas además de contemplar costumbres paganas heredadas de la cultura hispana latina. Siempre tienen algo que contar; por lo que se saben muchas leyendas y además tienen tradiciones complejas muy notables heredadas de los antepasados que dieron consejos anunciados por sus antecesores.Los apellidos más comunes son: Zambrano, Mendoza, Solorzano, Valencia y Cornejo
Leyenda aborigen del Colibrí
Cuenta la historia que en la época de los Chonanas cuando una mujer alumbraba, la partera le preparaba una pócima especial a base del corazón de un colibrí o picaflor, un pájaro exótico del trópico ecuatorial que lucha siempre por subsistir con el polen de las flores. El corazón del colibrí era disecado y se lo disolvía junto al zumo de la flor de naranjo, es decir se cocciona la flor de naranjo en agua. Según la tradición cuando el bebe nacía se le daba un poco de la pócima ya que si era niño heredaba la bravura y valentía del colibrí y si era niña se le transmitía la belleza de la flor de naranjo.