11/06/2024
¿PIENSAS ABANDONAR EL MINISTERIO?
¡Según algunas encuestas cristianas, existe una gran cantidad de pastores que han abandonado el ministerio y muchos otros que están considerando abandonarlo muy pronto. Aproximadamente, solo en los Estados Unidos, cada mes, 1700 pastores abandonan su trabajo pastoral.
Las mayores razones que se encuentran para este fenómeno entre otras son:
» depresión
» desánimo
» agotamiento
» problemas en la iglesia
» fracaso
» soledad
» presiones económicas
» problemas de salud
» conflictos matrimoniales
» dudas, etc.
La realidad, es que lo anterior aunque muchas veces se quiera negar, es lo que muchos pastores están atravesando sin que nadie lo note. A menudo, el trabajo del pastor es mal visto por el mundo y lamentablemente aún dentro de la iglesia.
¿Es esto normal? Hasta cierto punto, si lo es. Muchos de los hombres que hallamos en la biblia expresaron sus sentimientos profundos en más de alguna ocasión. Pablo se sintió abrumando “en gran manera” en muchas ocasiones (2 Cor. 1:8), sin esperanza de seguir viviendo (Hch. 27:20), preocupado, enfermo (2 Cor. 11:28,29), etc. David, Moises, Jeremías, Elias.. etc, igualmente. Pero en todos los casos, ellos siempre pudieron seguir adelante hasta completar su ministerio porque fueron ayudados por la mano de Dios.
Por eso mis amados hermanos, si usted es de los que nunca se preocupan por orar por su pastor, si nunca se detiene a preguntarle cómo está, en que puede ayudar, etc. ¡hágalo! Demuéstrele a su pastor que aprecia su trabajo, que está orando por el y su familia. No sea de los que solo se detienen a criticar los defectos (que todo pastor tenemos) de su pastor, a señalar sus errores, etc… ¡ame a su pastor genuinamente!
Y usted mi amado pastor, no se desaliente, no abandone su ministerio, “no tire la toalla”. Al final de todo, Dios no nos va a pedir cuentas de si siempre estuvimos alegres, no nos pedirá cuántas de si pudimos llenar el templo de gente, o si plantamos 100 iglesias, o si tuvimos una familia perfecta… amado pastor, lo único de lo que Dios nos pedirá cuentas ES DE NUESTRA FIDELIDAD. ¡Ánimo!, no se rinda… tome la espada y sigamos peleando que pronto aparecerá el príncipe de los pastores con el galardón tan ansiado (1 Pedro 5:4).
“¿Quién es, pues, el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su casa para que les dé el alimento a tiempo? Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, le halle haciendo así” (Mt. 24:45,46).
“Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor” (Mt. 25:21).
AVANZA AMADO PASTOR, DIOS ES TU FUERZA 🙌🏽📖
