
26/04/2025
Que lindo mensaje! Ojalá lo puedan leer!
A veces, las historias más grandes no vienen de la fama… sino de la fidelidad.
Ella es Sor Geneviève, tiene 81 años. No vive en un palacio ni sale en las noticias. Vive en una caravana, cerca de un circo, en Roma. Lleva una mochila, sandalias gastadas y una amistad de años con el Papa Francisco.
Cada miércoles, con paso firme y alma tranquila, visitaba sin falta a su amigo de años.
No necesitaban muchas palabras. Eran amigos de verdad. De esos que se entienden con una mirada. De esos que caminan juntos, aunque la vida los lleve por caminos distintos.
Él también la visitó muchas veces. No como líder de la Iglesia, sino como lo que era para ella: un amigo de verdad. Dos personas que se conocían sin títulos, sin etiquetas, solo con confianza y cariño fraterno.
Por eso, mientras el mundo despide al Papa, Sor Geneviève entra en silencio al Vaticano. No hace falta que la anuncien, todos saben quién es. Ella representa esa amistad fiel que no entiende de jerarquias y no necesita nada más que estar presente.
Sor Geneviève se queda en un rincón. No interrumpe. No habla. Solo deja que sus lágrimas acompañen el momento. Porque cuando uno quiere de verdad, las despedidas no se gritan… se sienten.
Gracias, Sor Geneviève por recordarle a esta generación que uno nunca será demasiado mayor para ser luz en el camino de alguien más, que no todo está dicho y que todavía hay mucho por dar.
Pero sobre todo, que los verdaderos amigos no se despiden con discursos sino con presencia.💛
Texto e imagen de la web.......Bendiabrazos