17/10/2024
APOSTAR AL FUTURO
Los cambios generacionales, siempre van de la mano de nuevas conductas; en épocas pasadas tener un objetivo a largo plazo era un proyecto, un reto por el cual se luchaba denodadamente, demás esta poner ejemplos de los que trabajando arduamente durante toda la jornada, estudiaban en los horarios posibles y así, al acabo de años lograban su ansiado objetivo: técnico, ingeniero, medico, arquitecto y muchos otros títulos mas. Era un esfuerzo para disfrutar “el Futuro” a largo plazo, muchas veces olvidando las gratificaciones del presente porque la prudencia, la discreción y la seguridad futura eran valores muy preciados. En el presente en cambio, los parámetros han cambiado y la felicidad tiende a confundirse con la gratificación inmediata, y así muchas personas postergan lo que tienen que hacer siendo consientes que esa conducta no es correcta y le traerá repercusiones negativas. Estudios estadísticos recientes indican de que 1 de cada 5 adultos tiene fácil a flor de los labios “el después lo hago” y 1 de cada 2 en jóvenes estudiantes (ó sea el 50 % ). Nuestro cerebro tiene un circuito virtuoso que va de asumir compromisos previos como para ejercitar la fuerza de voluntad. Todo esto se activa pensando, imaginando y visualizando el futuro. La ansiedad, el estrés, el miedo a equivocarse ó la impulsividad afectan el funcionamiento de este circuito, concluyendo en conductas que satisfacen las necesidades inmediatas a expensas de conveniencias futuras. Dicho de otra forma: “los individuos tienen limitada su capacidad para imaginar concebir logros o aciertos en su porvenir”. Por estas razones, dichas personas con frecuencia se deprimen, comen demasiado y tienen sobrepeso u obesidad, consumen alcohol en exceso, fuman y hasta incluso consumen sustancias químicas y dr**as, mostrando tendencia a estados de ánimo inestable. En esta dura pulseada entre la parte más” primitiva y emocional” y la otra que tiene que ver con “pensar y hacer planes a largo plazo”, algunos logran pensar a largo plazo y logran sus objetivos; otros fundamentan su “felicidad” en la gratificación inmediata y suele ser finalmente muy infelices.-