Our Story
Corria el año 1989 cuando Dios puso en el corazón de un hombre y una mujer, los Pastores Juan Carlos y Marta Rojas, la visión, levantar un medio de comunicación con un perfil diferente. Es entonces donde comienza a gestarse Radio Belén.
Vale mencionar que por esos años era todo un desafío entrar con un medio de contenido cristiano, ya que no era común y no habían modelos a seguir.
Aunque tampoco estaban los recursos para llevarlo a cabo, se dio el primer paso de FE, sí pura fe y nada más. Pero Dios respaldo este sueño poniendo en el camino a gente clave, gente que sin saber nada de Dios, serían usadas por Él para hacer posible el comienzo de un instrumento que posteriormente salvaría vidas. Si parece exagerado, pero los testimonios que llegaron con el tiempo de personas que se encontraban a punto de tomar decisiones drásticas en su vida y oyeron un mensaje de salvación y esperanza, que les hizo cambiar su determinación, nos llevo a permanecer y extendernos.
Es así como se comienza a trabajar incasablemente para poner en marcha Radio Belén. El pastor Juan Carlos Rojas junto Pablo Rojas, quien con sus apenas 14 años de edad se ponen manos a la obra. Es entonces que con don Juan Antonioli fabrican el primer equipo transmisor a válvula de 25 watts, si, solo 25 watts. Otros hermanos, entre ellos Domingo Rodríguez y Mario Navarro, comienzan a fabricar la primer torre que elevaría la antena transmisora ringo.
Había que interiorizarse, conocer sobre radio y lo relacionado con ello, y es donde con la incondicional colaboración de un hombre icono de la radiodifusión mendocina, don Eugenio Bloin, se comenzó a transitar el emocionante camino hacia un sueño a punto de hacerse realidad.
Enfocados en esta aventura de Dios, los pastores Juan Carlos y Marta comparten con la congregación del Tabernáculo de la Fe y colaboradores este desafío, encontrando corazones llenos de Fe, que apoyaron y apoyan este ministerio.
Mientras avanzaba la puesta en marcha nace la necesidad de un espacio físico donde funcionara la Radio. Es donde Dios pone en el corazón de un joven matrimonio que le creyó al Señor, Patricia y Daniel Navarro, el deseo de poner a disposición del ministerio su primera casa, si, una casa que todavía no había sido estrenada. De esta manera en el Bario Municipal ubicado en el pedemonte mendocino, lugar privilegiado por la altura, lo que contribuiría a un mayor alcance de señal, se acondicionaría la propiedad para los primeros estudios de transmisión de Radio Belén.
El trabajo recién comenzaba, no solo había que conseguir los elementos técnicos y edilicios para la puesta en marcha, también se debía tramitar los permisos correspondientes ante el Comité Federal de Radiodifusión de la República Argentina, lo cual no era tarea fácil ya que requería de gran dedicación para el cumplimiento de requisitos legales y seguimiento de expedientes, todos a tramitar en Capital Federal, Buenos Aires. Pero Dios mostró una ves más su mano fiel y poderosa moviendo a un hombre que hasta el día de hoy es una bendición para este ministerio, estamos hablando del Hermano Franklin Úbeda; quien con gran responsabilidad y amor, muchas veces dejo su propia empresa para acompañar y tomar como suya esta causa.
Relatado el trabajo previo, llega la hora de contar el gran día. Un 9 de Julio de 1989, un sol radiante, feriado por cierto por nuestro día de la Independencia. Un grupo de hermanos del tabernáculo de la fe y algunos siervos de Dios de la ciudad entre ellos el Pastor Rubén Malauca y Agustín Gonzáles, quien había traído un grupo musical, acompañaban a los pastores Juan Carlos y Marta Rojas en la inauguración oficial de Radio Belén.
Que día más Felíz, nos emocionamos al contarlo, todavía lo tenemos en nuestras retinas, y parece mentira que han pasado 20 años. Eso no es otra cosa que el favor y fidelidad de Dios.
Creímos en esta visión, pero creo que no imaginábamos que era un día historico, que estaría naciendo algo que el Señor usaría para glorificarse y mostrar el reino de Dios.
No podemos olvidar a dos personas de un valor incalculable, que dejaron alma corazón y vida en esta historia. Ellos estuvieron desde el principio y aunque es poco feliz contarlo, no podemos dejar de recordarles, ya que ellos están en nuestros corazones y sin duda gozando de la gloria de Dios. Gracias Hermana Isabel Torres de Zalazar y Carlos Silby Gibss.
Las primeras transmisiones fueron solo durante el día, en esa epoca, tampoco existía tanta música cristiana como en la actualidad y ni hablar de Cd`s, había que conformarse con los bien y ponderados Cassettes. Vale mencionar que en el haber de la radio se contaba con unos 15 ó 20 cassettes, con los cuales se comenzó a programar la música.
Desde el primer día existe un programa que sin duda ha dado sustento y base sólida a la programación y sin lo cual nada funcionaría, el “Altar de Oración”, con el Pastor Juan Carlos Rojas. Que madrugadas inolvidables.
Ya que estamos hablando de la programación, que buen momento para recordar el programa de la mujer donde la pastora Marta de Rojas ha motivado e inspirado a mujeres, que a través de un mensaje de buenas nuevas descubrieron su propósito como mujer.
Que decir de “Mañanitas Mendocinas” o “Matecitos Musicales” con el hermano Domingo Rodríguez y Eugenio Bloin un espacio que se transformo en un clásico de la Radio, donde la gente se expresaba e interactuaba. Muy ameno por cierto.
Seguimos avanzando en el tiempo y a pesar del humilde comienzo, había una clara visión de hacer con excelencia las cosas y no solo crecer sino marcar una línea de comunicación respetuosa, con contenidos de principios y valores cristianos, que impactara a la audiencia en general. Esto motivo a vestir la radio, llamamos a esto, elaborar una artística que identificara institucionalmente al medio, lo cual llevo a realizar una inversión más al contratar un estudio profesional donde se crearan y grabaran los primeros promos, jingles e identificaciones.
Al mismo tiempo y a medida que se iban logrando las primeras metas se iban adquiriendo los primeros instrumentos, caseteras, micrófonos, etc.
Esto nos ubica en otra etapa, cuando corría el año 1991 y se traslada la radio a un espacio cedido por la Iglesia tabernáculo de la fe, en el atrio del templo ubicado en pedro Molina y Lemos de San José, Guaymallén. Con esta nueva etapa y el tiempo que avanzaba llegaba el avance de la tecnología y con ella los equipamientos como una Cinta Abierta, la que se utilizaba para reproducir las promos identificatorias de “BELEN”.
No podemos dejar de mencionar que en esta nueva etapa se fabrica el segundo equipo de transmisión de 250 watts. Este transmitió las ondas de Belén durante algunos años, mientras se comenzaba a ahorrar dinero para adquirir el primer equipo homologado.
Es en el año 1994, cuando se logra una meta muy importante. El Pastor Juan Carlos Rojas viaja con sus hijos varones Pablo y Daniel a la provincia de Córdoba, donde se adquiere el tan anhelado equipo de transmisión IA, de 300 Vatios. Esto permitiría llegar con mayor potencia al gran Mendoza y dar un gran paso.
Estos detalles se transformarían en trascendentes, ya que la tecnología en nuestro país era muy cara o casi inalcanzable, para los recursos de una iglesia.
Con esta base y Radio Belén en marcha, Dios continúa acercando gente que entendiera la visión y se comprometiera con ella. Una de ellas afectadas por la misma radio y quien con posterioridad se convertiría en integrante de esta familia. La hermana Silvia de Muratore, quien por esos años ejercía su profesión de docente de nivel primario.
La familia Muratore y Villegas, serían pilares en el pleno desarrollo de Belén. Es más en su casa se armaría nuestro primer estudio de grabación, para elaborar las promos identificatorias. Muchas gracias Familia Muratore, hoy cosechan en España la siembra desinteresada hecha con amor, como parte de esta familia. Que el Señor les continúe Bendiciendo.
Que decir de la nueva programación que se elaboraría a partir de estos trascendentales cambios.
Pasado un tiempo de estar en estos estudios ubicados en el Tabernáculo de la Fe de Guaymallén, se comienza a edifica el edificio propio de BELEN FM, en un terreno contiguo a la Iglesia. Ya era tiempo de casa propia. Es así que se construye la planta baja, donde se trasladan los estudios.
Pasaron unos cuantos años, es aqui cuando se comienza con la segunda planta del edificio y en el medio con otro desafio, que era adquirir un equipo de mayor potencia. Es cuando Dios provee un hermoso transmisor marca Elenos de 3.000 Watts. Pero la edificación se hacia realidad y se reorganizaban los espacios a utilizar quedando en Planta Baja la recepción, oficinas administrativas y el estudio de grabación y producción general, mientras que en el piso superior se inauguraban los nuevos estudios, de mayor amplitud y con todas las comodidades.
Corria el año 2000 cuando en un viaje a Estados Unidos Dios nos permite relacionarnos con un ministerio que recién comenzaba y brindaban el servicio de radio satelital, Voz Cristiana, hoy CVC La Voz. Esto era un desafío pero entendimos que era de Dios y comenzamos a adquirir el equipamiento para transmitir satelitalmente, poniendo en marcha el proyecto en septiembre del mismo año.
Luego Radio Belén se integraba al mundo vía “on line” a través de Internet, logrando transmitir las 24 hs del día y los 365 del año, sin fronteras de por medio.
Fueron muchas las personas que de una u otra manera contribuyeron a la realización de una visión evangelizadora.
No cabe duda que BELEN, es algo de Dios, para bendecir y marcar precedentes. Sólo su mano la ha sostenido y llevado a niveles impensables.
Hoy, más del 47% de su audiencia es no Cristiana evangélica y eso dice mucho de la línea de comunicación, mensaje y periodismo que lleva adelante cada día.
Por la gracia de Dios, BELEN FM se encuentra dentro de los 10 medios más escuchados de la provincia, llegando a diferentes estratos sociales y con la más alta tecnología.
Graicas Señor por lo que has hecho hasta aquí y lo que seguirás haciendo.
Gracias Pastor Juan Carlos Rojas y Marta de Rojas por ser fieles a la voz de Dios.
Gracias Tabernáculo de la Fe por apoyar este ministerio.
Gracias a todo el personal que trabaja con denuedo, amor y dedicación para hacer de este medio un instrumento de excelencia en las manos de Dios.
Gracias a todos aquellos que han estado y contribuido de alguna manera en el crecimiento.
Gracias querida audiencia por acompañarnos cada día.
Sobre todo gracias Señor por hacer de Belén un Pan fresco.