23/08/2021
DESDE FORMOSA: “TENGO MIEDO, PERO TAMBIÉN TENGO FE.”
Eso dice Ana Lugo, enfermera que trabajó en el Centro de Salud de Pozo de Maza y se vio obligada a irse por la presión de personajes locales. El 28 de mayo pasado, las comunidades wichi de la zona dirigieron una carta al Ministerio de Desarrollo Humano provincial, reiterando su pedido de que la reincorporaran. Consultada sobre esta situación, la Sra. Lugo relató su experiencia, describió el sistema sanitario en la zona, el desamparo suyo y de otros frente a los atropellos sufridos y su disposición a volver. Mientras tanto, las comunidades también piden un médico. Hay sólo uno que los visita desde Ingeniero Juárez, a 50 km. La última vez fue hace dos semanas.
Dejamos a continuación el enlace al audio y la transcripción de la nota.
Audio: https://archive.org/details/entrevista-ana-lugo
Transcripción de la nota:
“AGRADEZCO HABER CONOCIDO A ESA GENTE”
Mi nombre es Ana María Lugo. Soy licenciada en enfermería y por el momento estoy trabajando en Formosa capital. Trabajé dos años en Pozo de Maza. Yo después de grande estudié enfermería, ya teniendo hijos, siendo abuela y el ministro doctor Décima cuando fue Ministro de Desarrollo Humano me dio esta oportunidad de irme a Pozo de Maza. Me dijo que acá en Formosa capital no había trabajo y que si yo quería realmente trabajar, iría a cualquier parte. Y me ofreció Pozo de Maza, que es una localidad que se encuentra a más de 500 km de Formosa capital. La necesidad era tan grande, mi problema económico de no poder pagar la luz, no poder mantener a mis hijos… que cuando el doctor Décima me ofrece le dije que sí, que no había problema. Me fui sin conocer la localidad. Fue un desafío porque el lugar es diferente, conocer una comunidad originaria aborigen… Primeramente ellos me observaban, desconfiaban de mí y poco a poco fui ganándome el cariño de ellos, digamos. En poco tiempo ellos me rodeaban mi casa, iban al centro de salud, querían que yo los atienda, y así fui encariñándome con la gente, tomando cada día más conocimiento porque ahí se toman todos los conocimientos, porque realiza varias labores, no solamente la del enfermero que es de la atención y la prevención, sino que es directamente de diagnosticar, medicar, hacer trabajo de parto, hacer trabajo de suturación…
Muchas cosas aprendí. Y agradezco a la persona que me dio la oportunidad de irme a trabajar ahí, muy agradecida con esto. Los años que estuve con ellos, creo que nunca voy a poder olvidar eso en los ojos de los niños y los ojos de las mujeres, cómo se aferraban a mí porque era como que yo era algo novedoso para ellos y ellos también eran novedosos para mí. Porque era ellos adaptarse a mí y yo a ellos. Y sinceramente, fue una experiencia muy hermosa. Agradezco a Dios haber conocido a esa gente. Soy muy bendecida de haberlos conocido a ellos. Muy bendecida.
EL CENTRO DE SALUD
Este centro de salud, que es Pozo de Maza, cuenta con varias comunidades (que son como 7 u 8 comunidades). A veces viene gente de otros lados, que son de Rinconada, de Pescado Negro. Ellos nos dan dos ambulancias. Con esa ambulancia recorremos las comunidades, nos dan la posibilidad de recorrer las comunidades porque ellos no todos cuentan con su movilidad, algunos sí, otros no… Cada comunidad tiene un agente sanitario. Algunos agentes sanitarios son de la comunidad. Estos agentes sanitarios nos permiten comunicar mejor con la gente porque hay algunos de la comunidades que no hablan nuestro idioma, no entienden nuestro idioma, o por ahí entienden y no pueden hablar, no pueden expresar… O por ahí lo dicen en tercera persona y uno puede malinterpretar; si no los conoce interpreta que le está sucediendo a otra persona, pero sin embargo les sucede a ellos. Y este agente sanitario a nosotros nos sirve como un nexo y la verdad es que nos ayuda bastante.
Todo lo que no se puede solucionar en Maza se va a (Ingeniero) Juárez. A veces es muy difícil para ellos y también para la gente que trabaja ahí porque como es una salita, tiene una cama que está así tipo en un corredor que es la entrada al centro de salud. Una sola camita y tiene dos camillas nomás, porque es un simple centro de salud. Resulta ser difícil porque a ellos les falta el agua, es una zona seca, pero cuando llueve el camino es imposible. Irse de Maza a Juárez, derivar al paciente, porque el viaje ida y vuelta casi son 6 horas (3 horas de ida y 3 de vuelta), ir a buscarlos a la comunidad, todo eso… A veces la ambulancia se queda en el camino, se rompe… A veces yo pensaba que no solamente es malo para la gente sino malo para nosotros también muchas veces, de madrugada, si tenés que ir a hacer una atención inmediata, irme lejos de Maza, irme a 20, 27 kms a una comunidad bajo lluvia, sin luz, en esos parajes entrar…
Por ahí la ambulancia se inclinaba, se trancaba. Me pudo haber pasado muchas cosas en esos lugares, un camino donde uno va y no sabés con qué te vas a encontrar… Hay bichos también, víboras… Tenía mucho temor por todo eso. Después, como que iba haciendo fuerza, iba creando fuerza porque pensaba que nada me tenía que pasar y lograr ayudar a esa gente que necesitaba.
En el tema sanitario falta más educación, mucha educación falta. He encontrado jóvenes, adolescentes, 13, 12, 14 años, niñas embarazadas… Hay los métodos, los diferentes tipos de anticonceptivos y también barreras, que es el uso del profiláctico, pero lo que más falta es el hablar, el diálogo, y buscar estrategias, hablar con los agentes sanitarios que son de ahí, de la zona, educarlos a ellos y que a su vez ellos puedan comprometerse y hablar con su gente. Si en esto se hace hincapié, vamos a lograr muchas cosas con la comunidad, porque ellos se interesan, les gusta, y cuando aprenden ellos manifiestan lo que aprenden, y eso es un logro.
DESAMPARO FRENTE AL ATROPELLO
Cuando yo fui, el director del centro de salud era un odontólogo, y él hacía el trabajo de médico. Él hacía la atención… el que guiaba a los enfermeros. Había otros dos enfermeros más, una que estaba a cargo de la farmacia y después hay un médico que es de Quebracho, pero viene una vez a la semana. Anterior a mí dicen que hubo un médico. Me parece que hubo una serie de problemas y esos médicos tuvieron que ir a otro lado. Y después que yo salí de ahí, no se qué pasó, qué problema hubo con la comunidad que ellos decidieron correr a este director del centro de salud, y le dejaron a un enfermero que trabajó justamente con él y que ahora está a cargo.
Antes de que eso y antes de que yo salga de la comunidad, venían sucediendo una serie de problemas, nombraron a un médico que fue a trabajar a la zona. Este médico también abandonó el lugar. Abandonó justamente por estos personajes que se encuentran trabajando ahí. Ahora de vez en cuando dicen que se va a visitar la zona. Está en Juárez.
El ministerio me mandaba mi sueldo como corresponde. Mi cuestión fue siempre reclamar mis guardias. Yo trabajaba como todos trabajan, de lunes a lunes –como los otros que estaban ahí con el director este, que son su gente–, y siempre ganaba mucho menos yo. Yo lo único que quería era trabajar, que me pagaran lo que corresponde y poder solventarme. De varias formas buscaban intimidarme. O sea, trataban de que yo me canse y que me vaya de ahí.
Muchas veces, incansables veces hablé con el coordinador, pedí socorro, le pedí auxilio, que me ayude, que me saque de ahí, que me lleve a otra comunidad si yo molestaba al director. Incluso cada vez que yo venía a Formosa me iba al ministerio, me presentaba, quería hablar con alguien y nadie me recibió. Para contar lo que estaba pasando, que yo no quería estar en conflicto, que me saquen de ahí, pero ellos no tenían nada. Ellos no tenían cómo justificar sacarme de ahí, si yo no había hecho nada malo. Porque en la comunidad, cuando le ofrecieron esto de correrme, sacarme, ¿sabe qué hicieron? Dirigentes de ahí juntaron más de 1800 firmas y pidieron que si el intendente le molestaba que yo trabaje justo ahí en Maza, vaya a Pozo Sargento. El coordinador les dijo a todo que sí, les prometió todo que sí a ellos, pero yo ya saqué mi licencia –para prevenir–, y con esa licencia me tuve que ir de Maza.
LA POSIBILIDAD DE VOLVER
Y con respecto a querer irme, yo se que la gente me quiere y si Dios quiere que me vaya me iría de vuelta. No se…
Sí tengo miedo, pero también tengo fe y creo que el miedo nunca va a poder contra la fe.