29/06/2024
BANDERAZO EN MIAMI ☀️ 🇵🇪 ⚽️
Confieso que cuando no puedo asistir a un banderazo de la selección siempre termino viéndolo por internet. Disfruto escuchando esos cantos melódicos acompañados de bombos y platillos, y me alucino entre la gente saltando y gritando igual que todos. Era Viernes así que me destape una “fría” (como dice un amigo de por acá) y busque ‘banderazo Miami’ en YouTube.
Me sorprendió ver que muchos fans se quejaban de que la selección nunca salió, y de que ningún jugador peruano se tomó la molestia de saludar a nuestros queridos incondicionales y regalar unas firmas o simplemente congratular a los fanáticos. Preocupado, veía como un voluminoso señor (con una dudosa apariencia de intoxicación etílica) le decia a las cámaras de ese canal que los jugadores nunca hicieron acto de presencia, de que le parecía una falta total de respeto a la hinchada y a la gente que viajó desde tan lejos.
Luego apareció entre la multitud una iracunda mujer que le explicaba al reportero lo difícil que había sido llegar al banderazo. Después decía lamentándose de que sus hijos están con el corazón roto, y que su otro hijo no fue a trabajar, y que el otro hijo lleva horas esperando, y mis hijos por aquí, y mis hijos por allá. Quedé un poco mareado pero senti empatía por lo que contaba la doña.
A esto le siguió una serie de fanáticos de todas las edades que reclamaban casi lo mismo; la ausencia de los jugadores integrantes de la selección peruana de fútbol.
Una vez que los fans expresaron sus emociones y el canal mostraba las imágenes en vivo de lo que pasaba, le tocó hablar al reportero y contar humildemente lo que había sucedido. Los “fanáticos” habían roto la barrera de seguridad, cruzaron la zona que era exclusiva para la prensa, y corrieron hasta llegar lo más cerca posible a la puerta del hotel. Un caos total.
Al señor beodo y a la doña que salieron demandando la presencia de los jugadores, les diría que se dejen de hacer las víctimas y de ser tan petulantes, ya que este tipo de comportamientos arruina la futura logística de un banderazo. La criollada está hecha para el estilo de vida de nuestro querido país, y si la sacamos de ahí, al menos, hay que saber usarla de manera correcta.
Cómo podemos reclamar respeto si nuestro propio comportamiento fue una falta total de respeto hacia la seguridad y las autoridades de este país. ¿Con qué derecho sale el señor borracho a exigir cosas en cámara? ¿A quién le importan los hijos de la Doña? En los videos se puede ver a gente de todas edades, colores, y sabores, corriendo deliberadamente hacia la puerta del hotel. Todos están ahí, y esto incluye mamás cargando bebitos, gente de la tercera edad, mujeres, y hasta niños chiquitos arrastrados por sus padres. Todos ansiosos por estar lo más cerca posible a la selección, todos rompiendo la ley rodeados de las autoridades y carros de policía.
Quizás algunos de ellos estén leyendo esto. En ese caso les pido que dejen de ser egoístas ya que lo están arruinando absolutamente todo para los que nos sabemos comportar. Es probable que se refuerce aún más la seguridad en el próximo banderazo por sus acciones y sea aún más difícil ver a los jugadores. El respeto es lo primordial y si no pueden respetar pues al menos saquense la camiseta antes de actuar de esa manera.
Ya rendidos, cansados, y sabiendo de que los jugadores no iban a salir por evidentes motivos, los fanáticos peruanos cerraron dicho evento poniéndose la mano al pecho e interpretando nuestro himno nacional (no, no es broma)
Este fue el desenlace de un infructuoso día en Miami.
