20/01/2023
¿Qué es un vino fortificado?
Un vino fortificado es un tipo de vino en el que se añade alcohol adicional durante el proceso de fermentación, con el objetivo de aumentar su graduación alcohólica y prolongar su conservación. Esta técnica se utiliza desde hace siglos en diferentes regiones del mundo y ha dado lugar a una amplia variedad de vinos con características y sabores únicos.
Entre los ejemplos más conocidos de vinos fortificados se encuentran el Jerez, el Porto y el Madeira. El Jerez es un vino fortificado producido en la región de Jerez, en Andalucía, España. Se elabora a partir de uvas Palomino, Pedro Ximénez y Moscatel y se caracteriza por su sabor a pasas, nueces y caramelo. El Porto es un vino fortificado típico de la región del Douro, en Portugal. Se elabora con uvas Touriga Nacional, Touriga Franca y Tinta Barroca y se caracteriza por su sabor a frutas rojas y su cuerpo potente. El Madeira es un vino fortificado producido en la isla de Madeira, Portugal. Se elabora con uvas Malvasía, Sercial, Verdelho y Bual y se caracteriza por su sabor a pasas, frutas tropicales y especias.
La técnica de fortificar vino se utiliza para conservarlo y prolongar su vida útil, ya que el alcohol actúa como conservante natural. Además, al aumentar la graduación alcohólica, se suavizan los sabores y se intensifican los aromas, lo que hace que estos vinos sean muy apreciados por los amantes del vino.
Los vinos fortificados son una gran opción para aquellos que buscan una experiencia de sabor única, con sabores intensos y aromas intensos, también son ideales para aquellos que buscan un vino con un mayor grado alcohólico, estos vinos son una excelente opción para acompañar postres o disfrutarlo solo.