07/09/2022
La referente de Salud Sexual y Reproductiva, Eleonora Díaz Rodríguez mencionó que la salud sexual y reproductiva entendida como una dimensión prioritaria, ejerce una fuerte relación con el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible, el bienestar de los países, las personas, familias y comunidades, en los que se resaltan los siguientes aspectos:
• Tener la posibilidad de tomar decisiones frente a cuántos hijos tener, cómo y con qué frecuencia mejora la calidad de vida de las mujeres, de su familia, de sus comunidades y de la economía del país.
• La prevención del embarazo en adolescentes contribuye de manera efectiva al rompimiento del círculo de la pobreza y permite a la juventud desarrollar su pleno potencial y al cumplimiento de sus proyectos de vida.
• El conocimiento y apropiación de los derechos sexuales y derechos reproductivos empodera a la mujer en el ejercicio de una sexualidad placentera y previene las violencias.
• Contribuye al ejercicio de nuevas masculinidades, reconociendo que los hombres son actores importantes en el proceso de transformación de la salud sexual y salud reproductiva para la prevención de embarazos no intencionados y otros riesgos.
• La educación integral para la sexualidad permite a niños y adolescentes conocer y proteger su cuerpo para prevenir violencias y situaciones nocivas en su desarrollo personal.
• La educación integral para la sexualidad fuera de la escuela es una oportunidad para apoyar a jóvenes que se encuentran en contextos de vulnerabilidad en la materialización y goce pleno de sus derechos.