08/01/2018
En estos cuatro días a Karina Macedo la asesinó su ex pareja, un hombre salteño, de un balazo, en Curuzú Cuatiá.
Al asesino de Azul Montero lo hallaron inimputable, a pesar de que, después de asestarle 19 puñaladas le robó la plata y el celular, escondió el cadáver y fue a refugiarse cerca de un Neuropsiquiátrico, con la ropa llena de la sangre de Azul. El asesino es un hombre.
En estos 4 días nuevecitos del 2018 seis hermanitas de entre 7 y 15 años, escaparon de su cautiverio en Santiago del Estero, donde durante TRES MESES fueron violadas por su padre, cuatro de sus hermanos y algunos otros invitados. Todos son varones.
Murió Débora, con todo el cuerpo quemado en Gobernador Gálvez. Su novio dice que no fue él, que ella sola se roció con alcohol y se prendió fuego.
En Corrientes Capital, en un inquilinato, una nena de 15 años fue drogada y violada por cinco hombres.
En estos cuatro días del 2018 Raúl Sebastiani, condenado a 5 años de prisión por golpear hasta casi matar a Eliana Tapia y gatillarle un arma en la boca, sigue prófugo. Eliana y su abogado le habían avisado a la justicia chaqueña que se iba a escapar, pero la tildaron de exagerada y resentida. Sebastiani huyó. Es un hombre, y tiene mucho dinero.
Todo lo que acabo de contarte, es violencia de género, violencia hacia identidades femeninas. Es poco probable que hayas visto estas noticias en titulares de diarios, portales o televisión.
En estos cuatro días una jovencita llamada Nahir mató a su novio, un jovencito llamado Fernando, de dos balazos en el pecho. Ese caso seguramente lo has escuchado, visto o leído. Estaban inmersos, según los amigos de él, en una relación tóxica, de esas que los diarios y las películas insisten en llamar "apasionadas", en un intento de convencernos de que la violencia está bien si es por amor.
Es terrible, es trágico, es doloroso. Pero no es violencia de género. La violencia de género se ejerce sólo desde un género opresor o dominante sobre un género oprimido o dominado física, económica, social, emocional y culturalmente. Y ese género somos las identidades femeninas.
No repitas como alienado, no te sumes a la invisibilización de las violencias que nos matan.
Si de verdad te importa la muerte de Fernando, si de verdad es, para vos, algo más que la excusa para escupir misoginia y odio, sumate, desde donde puedas, tu kiosco, tu periódico, tu remis, tu estudio contable, tu aula o tu ministerio, a la exigencia de la Educación Sexual Integral en las escuelas de todos los niveles, en todas las provincias. Para que las pibas y los pibes dejen de creer que violencia es pasión, que celos es amor, que una relación violenta es una relación "tormentosa".
Mientras tanto, nosotras seguimos muriendo a manos de hombres que se piensan amos. Y eso sí es violencia de género.
-Cecilia Solá-
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"Es cierto que aquellos varones que sufren violencia en relaciones de pareja pueden sentirse avergonzados y no piden ayuda ni denuncian, porque el propio patriarcado los enseñó a ser fuertes, valientes, machos. El patriarcado es una trampa para mujeres y para varones. Por eso luchamos para que se caiga. Lo dijo con una claridad conmovedora la hermana del joven asesinado, también ella, adolescente" https://www.pagina12.com.ar/86491-dos-disparos-que-nos-interpelan
"Que el arma homicida haya sido la del padre policía, que ese arma haya estado a la vista y al alcance de la adolescente, que el vocero de la familia sea él, que se refiera a su hija en términos judiciales habla de una situación concreta. No se trata de si ella gritaba, si el novio le había pegado a ella, si ella lo andaba buscando por los boliches: la dominación machista tiene una raíz mucho más profunda. Y hace falta correrse de lo sensacional para empezar a pensar." http://cosecharoja.org/nahir-galarza-y-el-fantasma-del-nadiemenos/
