24/03/2023
𝘛𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤...
Me despierto de sobresalto tras escuchar el golpeteo en mi ventana, me levanto a revisar, y nada, el ruido cesó de repente.
𝘛𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤...
Otra vez me despierta el mismo sonido, "¿Quién podría tocar a mi ventana a estas horas?".
Una vez más me levanto a revisar, pero no hay nada ahí afuera; sólo la oscuridad de la noche.
𝘛𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤...
Decido ignorarlo esta vez, lo que sea que fuere, está afuera, no hay ningún problema sinó le presto atención.
𝘛𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤...
El sonido no se detiene, esta vez decido prestarle un poco más de atención para ver si realmente había algo allí afuera.
𝘛𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤...
Me levanto por última vez a revisar sólo para notar que el sonido no provenía de la ventana, el sonido estaba dentro de mi casa; podría ser un pequeño insecto o algo por el estilo. Decido volver a dormir.
𝘛𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤...
Sin embargo, no puedo dormir por el sonido que se ha vuelto un tanto molesto; esta vez, decido prestar más atención y me quedo petrificado en mi cama al notar que el ruido no provenía de la ventana ni de ningún tipo de bicho, más bien, venía de mi espejo.
𝘛𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤, 𝘵𝘪𝘤...