
11/02/2025
🌊*El Pez que Tocó la Luz** ✨
En lo más profundo del océano, donde la oscuridad era absoluta y la presión implacable, vivía un pez de las profundidades, un r**e abisal de aspecto temible pero de alma noble. Su madre, una criatura antigua y sabia, siempre le contaba historias sobre el mundo de arriba, donde la luz del sol bañaba las aguas en un resplandor dorado.
—Hijo mío, allá arriba existe un mundo distinto, un mundo que jamás hemos visto con nuestros propios ojos, pero que muchos han soñado.
—¿Y por qué nadie sube, madre? —preguntaba el pez con la inocencia de quien aún no conoce el miedo.
—Porque es un viaje sin retorno. Nuestra especie pertenece a las sombras. Si subimos, morimos. ⚫🐟
Aquel pensamiento lo atormentaba, pero también lo fascinaba. Mientras su madre le enseñaba a cazar, a moverse con sigilo en la negrura eterna, su corazón latía con la incertidumbre de lo desconocido.
Pasaron los años, y aunque se convirtió en un hábil cazador, el deseo de ver la luz nunca lo abandonó. Se sentía atrapado en la monotonía de la supervivencia, condenado a un destino ya escrito. Sus compañeros le decían que el abismo era su hogar, que no debía soñar con lo imposible.
Pero un día, la voz de su madre, aunque amorosa, le pareció una cadena.
—Hijo, el océano es vasto, pero nuestro destino es el fondo. No hay nada arriba para nosotros.
Y entonces, lo decidió.
Esa noche, mientras su madre dormía, comenzó a nadar hacia la superficie. Sus aletas, acostumbradas a las corrientes pesadas del abismo, se movían con dificultad en aguas más livianas. Sintió miedo 😨, sintió el peso de la incertidumbre, pero también sintió emoción. 💙
Con cada metro que ascendía, la oscuridad se disipaba. Su cuerpo, hecho para la penumbra, temblaba con el cambio, pero su espíritu ardía con una llama que nunca antes había sentido.
Y entonces, lo vio.
✨ **La luz.** ✨
Un resplandor celestial iluminó su cuerpo deforme y oscuro, pero en ese momento no se sintió feo, ni extraño, ni fuera de lugar. Se sintió **libre**. Se sintió **vivo**.
🌊 El mar lo recibió con un abrazo cálido. Por primera vez, sus ojos vieron el azul del agua y sintieron la brisa de la superficie. Flotó en ese esplendor por un momento que pareció eterno.
Desde un barco cercano, científicos y camarógrafos quedaron perplejos ante la visión imposible. 📹 Un r**e abisal, un ser que nunca debería estar allí, había desafiado su destino.
Pero la gloria fue efímera.
Las dos horas pasaron rápido. Su cuerpo, diseñado para resistir la presión de las profundidades, no pudo sostenerse en aquel nuevo mundo. Sus órganos colapsaron, y su aliento se fue apagando lentamente.
Mientras descendía de nuevo, sin fuerzas para moverse, pensó en su madre. Sabía que lloraría su ausencia, pero también sabía que ella entendería. 💔
Él no murió como los demás. No murió en la monotonía de la oscuridad, sino en la grandeza de un **sueño cumplido**.
Su acto jamás sería noticia en el océano. Para su especie, su historia se perdería en las sombras.
Pero en la superficie, los humanos lo vieron. Filmado por primera vez en la historia, su valentía inspiró a quienes lo observaron.
🐟 **El pez que nunca debió ver la luz… la tocó.**
Y aunque la misma luz se lo llevó, su breve momento en la superficie se convirtió en un símbolo eterno.
Porque a veces, aunque el destino nos dicte miedo, debemos atrevernos a **nadar hacia la luz** a "vivir la vida aunque sea efímera" . 🌟
Casi estoy seguro que esté pez hizo más en su vida qué muchos de nosotros en la nuestra, por miedo.
Escrito por Xtoff Monkey
Reacciona si te gustó.
---
📢 **¡ESPECTACULAR!**
🗣 *"Podría tratarse del primer avistamiento registrado en el mundo de un diablo negro o r**e abisal adulto, vivo y a plena luz del día en la superficie",* escribieron desde la cuenta de Instagram de la ONG española.
📍 *Este evento ocurrió en las aguas de Tenerife, algo insólito debido a que nunca se había visto uno cerca de la superficie en ningún lugar del mundo.*
🎥 Esta especie de pez utiliza su apéndice dorsal repleto de bacterias bioluminiscentes a modo de cebo para atraer a sus presas, tal como se muestra en la película *Buscando a Nemo*. — en Society Monkey Marketing Digital & Publicidad.