30/01/2024
Queridos radioescuchas, seguidores y amigos del programa Rock Privado.
Les escribe Liliana, compañera de vida de Guillermo Martínez Minutti. Con mucho pesar en mi corazón les informo que después de estar hospitalizado por una emergencia médica nuestro amadísimo Guillermo trascendió hacia la luz eterna la semana pasada.
Guillermo no solo fue un extraordinario productor y conductor de radio, desde 1992 sus programas fueron una brisa fresca que dieron a conocer música imposible de escuchar en la radio tradicional, abriendo brecha para programas que surgieron años después, que siempre apostó a los sonidos más arriesgados y que sin duda alguna ha dejado huella en muchos de nosotros. ¿Cuántos no descubrieron a su nueva banda favorita por su programa? ¿Cuántos no descubrieron la belleza en la complejidad y en la ejecución musical del rock progresivo y géneros similares? ¿Cuántos incluso lo recuerdan desde la primera época del mítico Sobrecarga en la extinta Sí FM? La dedicación y pasión que le daba a su programa de radio era digna de admirarse, y así era con todo lo que amaba.
Durante 23 años acompañé a Guillermo en este viaje primero como colega de la radio, luego como novia y luego tuve la dicha de formar un hogar con él, y a lo largo de este tiempo lo vi crecer en tantas de sus múltiples facetas que sería imposible abarcarlas todas, pero puedo decirles que además de ser un gran difusor de la música fue un hombre extraordinario, increíblemente generoso y que dejó huella en muchas personas; fue un ser lleno de vida y pasión por todo lo que hacía y que fui muy afortunada de tenerlo a mi lado y compartir muchas de sus pasiones incluyendo la música.
Hoy les pido que por favor nos dediquen un pensamiento a mí y a nuestras familias para superar nuestro duelo; lamento no haberles podido informar con antelación, pero como comprenderán fueron semanas difíciles y mi dedicación a él fue de tiempo completo.
Gracias por todos estos años de música extraordinaria y amor incondicional Guillermo, te amo infinitamente hasta la eternidad.
