Arrendajo

18/07/2024

Pasen a leer esta reseña de Los santos inocentes, una novela de Miguel Delibes que cuenta cómo durante el franquismo unos campesinos se sacuden de las humillaciones y los maltratos que les imponen con una personal y violenta sublevación.

Los Santos inocentes ha sido llevado al cine y a las tablas. Las imágenes que acompañan el texto son de la obra de teatro de Javier Hernánde...

18/07/2024

03/02/2024

¿Cómo es nacer? Quizá no existe un momento más trascendental en la vida de un ser humano, después de la muerte, que el del alumbramiento. Sin embargo, no tenemos memoria de lo que ocurrió en ese trance crucial. Yo quise averiguarlo y por eso le pregunté a mi mamá cómo fue mi parto. Descubrí una historia de ternura, valentía y mucha lucha de mis padres, sobre todo de mi madre. El parto es tal vez la proeza más anónima de las mujeres. La historia que me contó mi mamá no satisfizo mi curiosidad. Yo quería más. Una amiga me dijo que ella había recordado su nacimiento gracias a una regresión, pero yo no podía conseguir una terapia de ese tipo. Entonces no me quedó otro camino que acceder a ese instante a través de la ficción. Por eso en el primer texto del fanzine Hojas de luz intento contar lo que podría sentirse al nacer, una experiencia de tremendo desarraigo, que me llevó otra vez a mi origen.

25/01/2024

Les comparto la introducción al fanzine Hojas de luz.

13/01/2024

La portada de Hojas de luz se creó a partir de una fotografía de una hoja de noro. En el sector del cerro Quitasol por donde acostumbro caminar, es la especie que tiene más presencia, a pesar de que muchos árboles han desaparecido por los incendios y las construcciones. Acostumbro visitar uno que está al pie de la quebrada Los seminaristas. Las ramas se extienden como un parasol, de ellas se columpian las hojas rojas y verdes y las semillas amarillas. En la tierra alcanzan a brotar las raíces nudosas, entre las cuales hay piedras en las que uno se puede sentar. Yo prefiero hacerme en el árbol, aunque pronto las picadas de las hormigas me obligan a pararme. Alguien puso una naranja y un banano entre las ramas para que los pájaros se acerquen a comer, pero creo que esos platos los disfrutarán las hormigas. Por aquí parece que sólo pasara el viento, entre la hierba larga, aunque se siente la presencia de los insectos, sus llamados agudos e intensos que cortan el aire. Aparte de eso, todo está tan tranquilo que también el corazón se aquieta.