EL AMATEUR nace a principios de 2009 por iniciativa de 3 deportistas devenidos en comunicadores: Marcelo Saidel, Sebastián Hoffman y Andrés Giménez. Tras años de intentar materializar la quimera, finalmente ese 2009 se animan a dar el salto y largan la primera edición de la revista que contaba con 40 paginas a full color impresas en alta calidad. En esos inicios, la revista contaba con secciones f
ijas:
- Son de Fierro (Automovilismo)
- De rabona (Fútbol)
- Pick & Roll (Básquet)
- El Amateur Ilustrado (Explicación de reglas de diferentes deportes)
- De volea (Tenis)
- Última secante (Vóley)
- Sobre ruedas (Patín)
- Piñón Fijo (Ciclismo)
- Perfiles (Entrevista a deportista consagrado)
- Soy Leyenda (Entrevista a deportista histórico)
- Alma de crack (entrevista a promesas del deporte)
- Paradeportivo (entrevista a atletas con capacidades diferentes)
- Boutique deportiva (deportes varios)
- Historia de Clubes
- Mens Sana (Psicología deportiva)
- Corpore Sano (Kinesiología y lesiones)
- Política deportiva
- Deporte con Rouge (Estética, cuidados de la salud, deporte y mujer, nutrición, vida sana, terapias alternativas)
- Viejos son los trapos (Deporte y 3º edad)
Las inclemencias de la economía nacional han llevado al medio que hoy dirigen los licenciados Marcelo Saidel y Sebastián Hoffman a achicarse a 32 paginas primero y 24 paginas en la actualidad, pero siempre sin perder la calidad editorial y gráfica que fue siempre la premisa principal y sello distintivo del medio. No obstante el agorero panorama financiero, la revista es, desde marzo de 2013, de distribucion GRATUITA, tras un importante esfuerzo y gracias al apoyo de nuestros anunciantes hemos logrado convertirnos en un medio masivo para así poder llegar a más familias. Con las redes sociales tomando por asalto estos nuevos tiempos en lo que refiere a comunicación, EL AMATEUR adopta la postura de aggiornarse e incorporarse a Facebook de manera enérgica, pero sin olvidar su idea originaria de continuar siendo un medio gráfico, artesanal si se quiere, y esto no responde a un capricho de sus creadores, sino a la ilusión de que el día de mañana, algún chico confiese "yo aprendí a leer con EL AMATEUR". Recién entonces, podremos decir con orgullo, "tarea cumplida".
