25/11/2021
Para pensar
LEY DEL ESPEJO: LUZ Y SOMBRA
La ley del espejo afirma: “El mundo exterior actúa como un espejo, reflejando tanto nuestra luz como nuestra sombra, siendo un retrato de nuestro mundo interior”.
Cuando afirmamos «conocer» muy bien a otras personas y en realidad lo que hacemos es proyectar sobre ellas nuestra propia realidad.
En el espejo proyecto mi luz y mi sombra. Cuando proyectamos nuestra sombra en los demás, ésta se manifiesta cuando aquello que vemos en los demás nos molesta muchísimo, de una manera desmesurada y sobre todo en cosas de escasa importancia.
La luz se proyecta en los demás cuando admiramos cualidades de otros que creemos que nosotros no tenemos, si lo admiramos es porque interiormente lo tenemos, sólo que no nos hemos dado cuenta o no lo hemos sacado a la superficie de la conciencia.
Generalmente lo que podremos ver en las otras personas serán esas “creencias inconscientes” acerca de nosotros mismo. Esas cosas que negaremos fervientemente si alguien nos pregunta. Si inconscientemente te crees una persona sin autoestima, por resonancia, te relacionarás con múltiples personas que no te valorarán los suficiente. Te puede pasar de forma negativa y de forma positiva también.
Esa es la belleza de este proceso. Se manifestarán en nuestra vida tanto nuestra luz, nuestra belleza interior, como nuestra sombra más profunda. Nuestros miedos, traumas y heridas emocionales. Debemos entender que todo lo que ocurre en nuestra vida es un reflejo o proyección de nuestro inconsciente, y que todo está relacionado con nosotros mismos. Ya es hora de dejar de culpar a los demás y de tomar consciencia y responsabilidad de nuestra vida.
Cuando te encuentras en situaciones o momentos difíciles debes preguntarte qué está tratando tu inconsciente que veas. Qué hay en la persona que está frente a ti, o en la situación que estás viviendo, qué "deberías" hacer consciente. En otras palabras hacerte la pregunta de oro: ¿para qué me ocurre esto que me ocurre? Quizás te molesta mucho la gente tacaña, porque en el fondo no quieres admitir que tú también eres un poco avaro contigo mismo o con los demás.
Esta ley lo que pretende principalmente, es que a través de observarnos a nosotros mismos y ver qué es lo que nos molesta, obtengamos más autoconciencia, proporcionándonos así una “guía” poderosa.
Desscubrir nuestras sombras, haciendo consciente lo inconsciente, a través del autoconocimiento personal, encontrando el equilibrio y alcanzando más momentos de calma y serenidad.
Si alguien nos despierta emociones desagradables, aunque no lo sepamos, probablemente, es porque de algún modo refleja algo de nosotros mismos que no queremos ver y tenemos que trabajar en ello, dándole espacio para permitirlo, sanarlo, o liberarlo.
Al hacerlo plenamente, nos damos cuenta de que no tenemos por qué sentirnos constantemente víctimas de nuestras circunstancias. En gran medida, en nuestras manos está cambiar la realidad, adquiriendo la responsabilidad por nosotros, y brindándonos la oportunidad para actuar y dejar de sentirnos indefensos y desprotegidos ante el resto del mundo.
Experimentaremos tal transformación interior que llegará a afectar al exterior, cambiando a mejor todo aquello que antes nos disgustaba.
CÓMO CONOCER NUESTRA SOMBRA
Observa y pregúntate:
“¿Qué es lo que refleja este espejo de mí?”
EL LADO OPUESTO: te perturba tener delante una persona que es todo lo contrario a ti. Este caso nos daría respuesta al ejemplo que hemos puesto al principio sobre el orden. Si eres una persona ordenada no soportas el desorden.
¿Cómo trabajarlo?:
Busca el equilibrio.
Siendo muy rígido/a te situarás en un extremo y desequilibrarás la balanza, sin embargo, puedes equilibrarla siendo un poco más comprensible y no tan duro/a contigo mismo/a, a la hora de querer tenerlo todo ordenado o bajo control. Al ser más permisivo/a con tu persona, no te generarán tanta rabia las acciones de los demás.
SIMILITUD: lo que te molesta es en realidad una parte tuya que no quieres ver. Es una parte oscura, como una sombra. Es algo que no quieres aceptar, y lo que se resiste, persiste.
Arroja luz a tu sombra buscando los puntos en común.
Al verlo claramente, esa parte de ti dejará de luchar contra tu propia sombra y precisamente eso será lo que te ayude a cambiar lo que no te guste. Aunque parezca contradictorio, sin aceptación no hay transformación posible.
EXPECTATIVAS EGOÍSTAS: sucede cuando tenemos unas altas expectativas en una situación o con una persona y empezamos a ver que no coinciden con la realidad. Es decir, hemos idealizado a alguien o a algo y al darnos cuenta de que no es como queríamos lo intentamos controlar y manipular para que cambie y se adapte a la idea que nos habíamos formado en un principio.
Deja la visión egocéntrica de lado
Hay una parte en esta vida que escapa de tu control, y esa es la que está en manos de los demás y de los factores externos.
Cuando te des cuenta de que de nada sirve intentar controlarlo todo, te quitarás un peso de encima, actuando solo cuando sea necesario y dejando que las cosas fluyan a su manera.
Responsabilizarte de ti mismo y hazte cargo de lo que esté bajo tu control.
Coge toda esa energía que estás desperdiciando en intentar cambiar al otro y dirígela hacia algo constructivo y que sí que esté en tu poder, es decir, cambiarte a ti mismo y darte lo que necesitas.
Cuando te encuentras a ti mismo/a sintiéndote víctima de una persona que te está haciendo daño, y no te das cuenta de que, aunque tú no le estés tratando igual a ella directamente, se lo estás haciendo a otra persona.
Si nos ponemos en la piel de los demás, como resultado les trataremos mejor y no haremos lo que no nos gustaría que nos hicieran.
Si no extraemos la enseñanza, se repetirán constantemente hasta que decidamos arrojar claridad a nuestra oscuridad, conociéndonos más a fondo, haciéndonos conscientes de todo lo que sucede y actuando en consecuencia.
Finalmente, lo esencial es el perdón. Si sentimos resentimiento hacia alguien y no lo conseguimos perdonar, difícilmente podremos encontrar la calma y estabilidad emocional que tanto ansiamos. Cuando estás resentido te encuentras con dos opciones: decidir perdonar o decidir no hacerlo.
Perdónate a ti.
"La noche oscura del alma”: Situaciones muy exageradas donde nuestro mundo se precipita en el caos y surgen nuestros mayores miedos. Cuando salimos de él, somos personas diferentes. Despierta una fuerza en tí que es tu gran aliado.
En psicología se utiliza el término , que sería conocerte a ti mismo/a con tus defectos y virtudes y aceptarte tal y como eres.
La empatía es clave, saber el por qué y entenderlo ayuda aliviar la angustia generada.
El agradecimiento es una técnica muy poderosa. Puedes agradecer a quien te hizo daño en el pasado, porqué te enseñó a ser más fuerte y a sacar habilidades que ni si quiera habías descubierto en ti mismo/a.
“Me libero y te perdono”.
Cuanto más conocimiento tienes de ti mismo/a más claro visualizas lo que quieres en tu vida, dirigiendo así tus esfuerzos hacia el alcance de tus objetivos y tus metas.Integración de tu sombra. Al reconocer tu lado oscuro, deja de ser un impedimento invisible constante.Más empatía y compasión. En el momento que te pones en el lugar del otro, aceptas la imperfección “humana” ajena, puesto que también la percibes en ti.Mayor equilibrio. Lo externo te afecta en menor medida, te encuentras más conectado/a con tu paz interior.Humildad. Aprendes a verte tal y como eres, sin máscaras, aceptando tus debilidades y desapegándote del ego.Liberación de la actitud de víctima. Dejas de ceder tu poder personal a los otros para empezar a responsabilizarte de tu persona.Más sabiduría y libertad. Comprensión sobre las cosas y libertad de elección, puesto que estás menos condicionado/a por lo exterior.
" SABER PERDONAR ES DE SABIOS, PORQUE ODIAR A ALGUIEN ES COMO BEBER VENENO Y ESPERAR A QUE MUERA EL OTRO. "
Fuentes informativa: Libro Ley del Espejo de Yoshinori Noguchi
AF-MENTES CÓSMICAS