14/01/2025
Hallazgo arqueológico histórico en Grecia: tras años de búsqueda, desentierran un majestuoso templo de Poseidón de 2.500 años con un singular diseño arquitectónico.
En la región costera del Peloponeso occidental, arqueólogos desenterraron un templo dedicado a Poseidón, el dios griego del mar y de los terremotos. Ubicado cerca de la antigua ciudad de Samikon, este santuario, que data de hace aproximadamente 2.500 años, destaca por sus dimensiones monumentales. Pero también por su singular diseño arquitectónico, que desafía las normas establecidas de los templos griegos clásicos.
Este descubrimiento captura la atención mundial, y abre nuevas perspectivas sobre la religión, la arquitectura y la vida social en el mundo helénico. El templo de Poseidón en Samikon es un testimonio de cómo un espacio sagrado podía convertirse en un lugar de encuentro para varias polis, y cómo la devoción a una deidad común podía fortalecer los lazos entre comunidades diversas.
El descubrimiento fue el resultado de más de una década de investigaciones dirigidas por equipos de arqueólogos griegos y austríacos. Las primeras exploraciones en el sitio, que comenzaron con estudios geofísicos preliminares, no revelaron la magnitud del hallazgo que se encontraría años después.
En 2022, las primeras estructuras del templo comenzaron a emerger de la tierra, lo que marcó el inicio de una excavación intensiva que ha desenterrado un templo de 28 metros de largo por 9,5 metros de ancho.
El templo se caracteriza por sus características inusuales que rompen con los patrones de simetría y simplicidad que dominaban la arquitectura religiosa en la Grecia clásica. Mientras que los templos griegos tradicionales se diseñaban con un solo altar y una única celda para la estatua del dios o diosa venerado, este templo de Poseidón presenta un diseño mucho más complejo.
Su estructura consta de dos grandes salas interiores, un vestíbulo y una posible cámara trasera, lo que ha llevado a los expertos a replantear la función y la importancia de este edificio en el contexto religioso y social de la época.
La arquitectura del templo de Poseidón en Samikon representa un caso excepcional en la historia de la arquitectura helénica. Los templos griegos se distinguían por su simetría rigurosa, como el estilo dórico de la construcción religiosa en la antigua Grecia. Sin embargo, el templo de Poseidón desafía esta estética al incorporar un diseño con varias cámaras y espacios interconectados, lo que sugiere que el lugar tenía un propósito más allá de la simple adoración del dios del mar.
Una de las teorías más aceptadas por los arqueólogos sostiene que las dos salas principales del templo eran dedicadas a diferentes deidades o, alternativamente, servián como espacio para las reuniones de las ciudades tripilianas. Esta federación de ciudades-estado en el suroeste de la península del Peloponeso estuvo unificada por intereses religiosos, culturales y, probablemente, políticos. Los arqueólogos también sugieren que una de las salas se utilizaba como lugar de encuentro para rituales y festividades compartidas por las polis que formaban parte de la liga tripiliana. Esto refuerza la idea de que el templo no solo era un centro religioso, sino también un punto de conexión entre las comunidades.
Además, la excavación ha sacado a la luz columnas de piedra que sostenían un techo cubierto por tejas de arcilla. Curiosamente, algunas de estas tejas fueron reutilizadas en una remodelación del templo, llevada a cabo alrededor del siglo IV a.C. Este hallazgo demuestra la habilidad técnica de los constructores de la época, quienes no solo eran capaces de crear monumentos colosales, sino también de incorporar materiales reciclados para su preservación.
Este sitio se perfila como uno de los descubrimientos arqueológicos más significativos de la antigua Grecia. Sin duda, todavía quedan muchos secretos sobre el mundo helénico.